El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha reclamado que «España mire hacia el interior» y dedique los fondos de recuperación de la UE para equilibrar territorios y afrontar el problema de la despoblación.
Mañueco se ha pronunciado de este modo en Albarracín (Teruel) tras reunirse con los presidentes autonómicos de Aragón y Castilla-La Mancha, Javier Lambán y Emiliano García-Page, con quienes se ha escenificado un nuevo pacto denominado ‘Declaración de Albarracín’, en virtud de la cual reclamarán al Gobierno estatal que las ayudas que la Unión Europea dispensará para atajar la despoblación no se queden sólo en Cuenca, Teruel y Soria y puedan extender su radio de acción más allá de sus límites provinciales, beneficiando también a otros territorios colindantes y en la misma situación de baja densidad de población.
Así, Fernández Mañueco ha destacado el trabajo realizado por los tres gobiernos para avanzar en la búsqueda de soluciones ante este problema estructural que se centra en tres provincias concretas en este caso como son Soria, Cuenca y Teruel. «Esto es un compromiso con las personas, estamos comprometidos los tres gobiernos en afrontar la despoblación, es un objetivo compartido y una preocupación compartida», ha defendido el presidente de Castilla y León.
En este punto, Mañueco ha defendido que el Acuerdo de Albarracín rubricado este jueves es un «paso fundamental» con el objetivo de que «España mire hacia el interior». «Los fondos de la UE deben servir para equilibrar las políticas públicas en el territorio», ha defendido.
El presidente de Castilla y León ha explicado que esta declaración es «una llave para abrir las puertas de las ayudas» a Teruel, Soria y Cuenca con esa reducción del 20 por ciento de costes laborales anuales de las empresas que se instalen en estas provincias.
Ahora, el siguiente paso es que el Gobierno de España acelere los plazos para poder acceder a este régimen y mejorar así la implantación de empresas en zonas adyacentes, ya que «es justo que estas empresas tengan facilidades para invertir y crear empleo» de cara a «fijar población».
Fomentar la incorporación de familias al mundo rural mejorando la prestación de servicios es otra de las propuestas blindada por los tres presidentes, según ha dicho Fernández Mañueco, quien ha añadido la necesidad de buscar herramientas para apuntalar el «compromiso» con las zonas despobladas.
En su opinión, es «crucial» que ahora la Unión Europea apuesta junto a las regiones afectadas contra el problema de la despoblación, un objetivo que «tiene que estar presente» en todos los planos políticos en el corto y medio plazo, también en la Conferencia de Presidentes.
La financiación autonómica y el nuevo modelo «tiene que tener presente, como objetivo de país», las diferencias entre las zonas despobladas y las grandes ciudades.
«Las tres comunidades hemos demostrado nuestro compromiso con España. Hemos dado lo mejor de nuestro territorio. La vida de personas que se han desplazado a otras ciudades para construir nuestro país. Ahora necesitamos que España mire hacia el interior y que apuesta por el mundo rural», ha reivindicado Fernández Mañueco. Con todo, exige que los fondos europeos vengan a «equilibrar» los territorios.
Por último, ha defendido que el compromiso en la lucha contra la despoblación es «irrenunciable» para la Junta de Castilla y León. «Debemos ir a elementos concretos sobre servicios públicos básicos», ha aseverado, tras lo que ha considerado «irrenunciable» la apuesta por la digitalización.