La vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, Carmen Calvo, ha defendido la «diversidad religiosa» frente a quienes la «niegan» y ha subrayado que «la religión es un hecho fundamental».
«Toda la gran política tiene que nacer de no negar nunca la realidad, que en nuestro país es de diversidad, después cada quien la podrá administrar con sus criterios ideológicos con el respaldo libre que las urnas le den, pero la buena política está en la realidad», ha subrayado Calvo.
Así lo ha manifestado la vicepresidenta primera este viernes durante el acto de presentación de ‘Municipios por la Tolerancia: Hacia una mejor gestión de la diversidad religiosa’, un programa para ayudar a los gobiernos locales a gestionar la diversidad religiosa, elaborado por la Fundación Pluralismo y Convivencia en colaboración con la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) y que cuenta con el apoyo del Instituto de Derechos Humanos de la Universidad de Deusto.
En estos tiempos, según ha dicho Calvo, este tipo de iniciativas son aún más importantes porque hay «enemigos» y «puntos de inflexión que pueden ir a la luz o a la oscuridad».
«Por eso es tan importante que estemos vigilantes donde se juega un partido profundo que no es solo la dureza de la pandemia y sus crisis, sino ese partido donde nos jugamos las libertades, el diálogo, la paz, la convivencia, el respeto, la diversidad, la solidaridad y la igualdad», ha subrayado.
Para Calvo, la política de este siglo y del siguiente se jugará para quienes sepan gestionar la realidad de la diversidad y para quienes «no la nieguen», y ha advertido de que «cuando en la mente de un mal gobernante» existe «un referente único», este «acaba imponiéndose dictatorialmente». «De eso sabe mucho la historia», ha avisado.
La vicepresidenta primera ha asegurado que la evolución que España ha experimentado en materia de libertad religiosa «es un activo, no un problema» y ha colocado al país en un «espacio moderno, avanzado, de libertades, donde algunos llegan de fuera y otros lo ejercen desde dentro».
GRAN DEFENSORA DEL HECHO RELIGIOSO
Además, Calvo se ha declarado «una gran defensora del hecho religioso como parte connatural de lo humano». «La religión es un hecho fundamental en la vida y naturaleza humana y, desde la política verdadera, tenemos que estar al regate de la protección de esa gran libertad que contempla la Constitución en su artículo 16», ha subrayado.
Por ello, ha enfatizado que da «gran valor» a las políticas públicas que protegen la libertad y ayudan al culto, porque supone «atender a un hecho trascendente».
En todo caso, ha puntualizado que «cada quien administra su trascendencia como puede: hay quien lo hace agarrándose a la cultura, al arte, a la negación de la religión, y quien lo hace aceptando con libertad la religión que considera oportuna. En este sentido, ha puntualizado que «no hay un marchamo de verdad» y hay que «proteger la elección de cada uno».
NO RETROCEDER EN TOLERANCIA
Por su parte, el presidente de la FEMP y alcalde de Vigo, Abel Caballero, ha defendido que «los municipios son en esencia tolerancia» y ha destacado que la religión como «la convicción más profunda de un ser humano» tiene que encontrar «acomodo y apoyo» por parte de los ayuntamientos.
Además, Caballero ha hecho una «llamada de atención» para «permanecer en el avance» frente a las «tendencias de retroceso». «Debemos marcar puntos de no retroceso en ámbitos tan sensibles donde es tan fácil que algunos intenten retroceder», ha advertido.
Asimismo, ha animado a todos los alcaldes y alcaldesas de España a sumarse a este programa de ‘Municipios por la tolerancia’ para poner de manifiesto lo que comparten y «evitar que aparezca la controversia política, salvo con aquellos que hay que tenerla porque intentan el retroceso».
En el acto, la directora de la Fundación Pluralismo y Convivencia, Inés Mazarrasa, ha puesto de relieve que España «no es un país monocolor en convicciones religiosas» y la presencia de confesiones distintas a la católica «se ha ido multiplicando», por lo que ha subrayado la importancia de dar respuestas a los ayuntamientos ante las novedades que se derivan de esta pluralidad.
Por su parte, el rector de la Universidad de Deusto, José María Guibert, ha insistido en que «la diversidad no es un problema sino una oportunidad para el desarrollo humano» y en que «una sociedad solo puede ser diversa si es libre».