Los batidos sustitutivos son, posiblemente, uno de los formatos más conocidos de los sustitutivos de comida. Son utilizados como otra opción a la hora de realizar comidas del día y están compuestos por diferentes nutrientes en una preparación ya lista para tomar. Es el caso de los productos que presenta Siken.
En un contexto de una dieta diaria baja en calorías, constituyen una forma de consumir puntualmente un menor aporte calórico. Se suelen emplear para sustituir una o dos de las principales comidas del día, según esté previsto en el plan individualizado para cada persona.
Formatos y composición de los sustitutivos de comidas
Los formatos más habituales en los que se pueden encontrar son en batidos y en barritas. Los batidos sustitutivos tienen la ventaja de estar ya listos para consumo. Resultan fáciles de transportar, al gimnasio o al trabajo. Y en caso de dificultades para tomar alimentos sólidos, pueden resultar una alternativa. Existe también la opción de encontrarlos en sobres con el producto en polvo para diluirlos en agua y mezclarlo uno mismo.
Por otro lado, también encontramos sustitutivos de comidas en formato barritas. Se pueden encontrar en múltiples sabores, como chocolate, naranja o frutos del bosque, entre los más habituales.
Los sustitutivos de comida están compuestos por todos los nutrientes que tu cuerpo necesita en una comida: hidratos de carbono, proteínas, grasas, fibra. Además, contienen micronutrientes, entre los que están las vitaminas y los minerales. La fibra, un elemento importante para el tránsito intestinal y que junto a las proteínas consiguen un efecto saciante.
Existen productos con un objetivo más allá de la voluntad de adelgazar*. Como sustitutivos de comida pueden aportar los nutrientes de una comida habitual en situaciones en las que sea complicado tomar alimentos sólidos. También son una solución rápida cuando hay poco tiempo para preparar un almuerzo o una cena.
Fomentar un entorno adecuado
En un contexto de alimentación equilibrada, estos productos pueden suponer un complemento en la dieta para mantener o bien para adelgazar*. Es básico el consumo de todos los nutrientes necesarios para un buen equilibrio. Para ello es importante llevar un control sobre la alimentación, con la supervisión de especialistas, y elegir las combinaciones de alimentos y técnicas de cocinado que mejor repercutan en la salud de cada uno.
El uso de los sustitutivos debe ir acorde con una dieta equilibrada sin olvidar la realización de actividad física. Llevar una vida sedentaria resulta perjudicial para el bienestar personal, y es un lastre para los objetivos de adelgazamiento que se quieran conseguir con una dieta hipocalórica. El ejercicio físico, con las actividades adaptadas a la edad y el estado de cada persona, proporciona grandes beneficios y es imprescindible para llevar una vida saludable.
*Para perder peso: la sustitución de dos de las comidas principales del día por un sustitutivo en una dieta baja en calorías ayuda a perder peso.
Para mantener: la sustitución de una de las comidas principales del día por un sustitutivo de la comida en una dieta baja en calorías contribuye a mantener el peso después de la pérdida de peso.