El estrés es uno de los enemigos que tienen las personas cuando hacen dieta. Se ha convertido en el escollo a superar que no es nada fácil. Tiene la particularidad derrumbar cualquier tipo de régimen alimenticio que tengas y, además, te hace subir de talla.
Para llevar un estilo de vida saludable, no solo es necesario tener una buena alimentación, sino también ejercicios, descanso y un excelente estado emocional. A menudo, pueden proliferar muchísimas perturbaciones que ponen en jaque el equilibrio del practicante. La gran mayoría no encuentra una escapatoria para evitar sucumbir en el intento de bajar de peso.
Es por ello que, la idea de mente sana y cuerpo sano es una relación inquebrantable. Y es que, cuando están fragmentadas, lo que va ocurrir en tu cuerpo no será favorecedor aún teniendo una buena ingesta de alimentos. Veamos cómo incide el estrés en la forma que orientas tu alimentación, y por qué se dice que «sube de talla».
4No dormirás bien
Los especialistas manifiestan que, una de las claves para no dejar que el estrés haga de las suyas es tener autocontrol. De seguro te preguntarás cómo se consigue. A pesar de que no hay una fórmula, cada quien es propio forjador de su destino. Ha de conocer cuáles son sus metas y el por qué quiere bajar de peso.
Son las motivaciones que, desde luego, nadie tiene las mismas. Entonces, a partir de allí, puedes tomar impulso y conseguir que no aumentes de peso. Si se da el caso de que el estrés te está alejando de tu meta, ya tienes que encontrar en los médicos un punto de apoyo para que transformes tu estilo de vida el cual no te está jugando a favor.
Y es que, pasar por estrés implica no dormir bien. Te verás inmerso en grandes desequilibrios a nivel de la azúcar en la sangre. En consecuencia, tendrás siempre hambre, ya sabemos que sis tienes hambre vas a comer más cantidad que antes.