España ocupa la tercera posición en segregación escolar en la etapa de Primaria en la OCDE, solo por detrás de Turquía y Lituania, según un estudio realizado por Save the Children y el Centro de Políticas Económicas de Esade (EsadeEcPol).
El informe, titulado ‘Diversidad y libertad: reducir la segregación escolar respetando la capacidad de elección de centro’, señala que una excesiva segregación escolar puede convertirse en «un problema para la igualdad de oportunidades y la eficiencia del sistema educativo, generando mayor fracaso y abandono».
Así lo indican los autores del estudio: el especialista en equidad educativa en Save the Children, Álvaro Ferrer, y el senior fellow de educación y director de investigación en EsadeEcPol, Lucas Gortázar.
El documento, realizado en base a los datos de TIMSS (Trends in International Mathematics and Science Study), analizados por primera vez en España, pone de manifiesto que la segregación socioeconómica en España es «muy alta» en Primaria y se encuentra «en la media» de la OCDE en secundaria.
Por comunidades, los datos muestran que la segregación en la Comunidad de Madrid ha crecido «de forma muy notable» y es hoy la comunidad autónoma «con mayor segregación y una de las regiones con mayor segregación en toda la OCDE».
A partir de datos del estudio internacional TIMSS de 4º de Primaria y de PISA para 4º de ESO, los autores observan también «una enorme variación por CCAA. Asimismo, señalan que la segregación por origen nacional es, comparativamente con la media de la OCDE, «semejante» en Primaria y «más baja» en ESO, aunque es «alta» en algunas CCAA como País Vasco o Andalucía.
El documento plantea diversas soluciones, algunas ya probadas con éxito en otros países, como financiar a los colegios en función del alumnado vulnerable que escolarizan o modificar el algoritmo de asignación de plazas (conocido como mecanismo de Boston), para aumentar la diversidad en los colegios y hacer más justo el proceso de elección.
Asimismo, la propuesta de Save the Children y EsadeEcPol establece la necesidad de aumentar el peso de los criterios socioeconómicos (renta o nivel educativo familiar) en los baremos de admisión y eliminar puntos por antiguo alumno o discrecionales en los baremos de prioridad.
Los autores del informe insisten, igualmente, en promover un sistema de doble reserva de plaza para el alumnado socialmente desaventajado y aventajado, ajustado a la composición social del entorno, así como una nueva gestión de la ‘matrícula viva’ (con frecuencia de origen extranjero y escolarización tardía), que suele enviar a ese alumnado a centros educativos que ya sufren problemas de segregación.
«La segregación escolar debe abordarse desde las políticas educativas, ya que es un problema grave que va a ir a más durante los próximos años. Por ello, realizamos una propuesta aterrizada, concreta y viable políticamente, que mejora las oportunidades de los alumnos y respeta (e incluso amplía) la libertad de las familias. Esperamos que la propuesta permita a las CCAA avanzar en esta materia y al sistema educativo de salir del bloqueo y la polarización política que tanto le está afectando», ha destacado el director de EsadeEcPol, Toni Roldán.
Los autores del estudio lamentan que, en los últimos meses, «la polarización política ha permeado en el debate educativo, para convertirlo una vez más, en rehén de la lucha partidista».
«La calidad del debate se ha empobrecido más si cabe, por lo que corremos el riesgo de seguir simplificando problemas complejos y abusar de falsas dicotomías aparentemente irreconciliables (diversidad-libertad) y de luchas de legitimidades (pública-concertada)», advierten.