Díaz llama a movilizar Madrid con «alegría» ante el «odio» de Vox

La vicepresidenta tercera del Gobierno, Yolanda Díaz, ha asegurado que la campaña electoral en Madrid «cambió de signo ayer» y ha emplazado a recorrer la región «con alegría» porque ahora la izquierda tiene que salir a ganar, de la mano coordinada con otras fuerzas progresistas y sindicatos para fraguar esa movilización masiva en los barrios.

Además, ha advertido de que en los comicios del 4 de mayo está en juego «mucho más que la democracia», pues está en liza que Vox forme parte del Gobierno regional y decida sobre las vidas de la población, dado que «van en serio» y «practican política desde el odio».

Por otro lado, la ministra de Igualdad, Irene Montero, ha pedido al Madrid «feminista y valiente», al «Madrid republicano» y al Orgullo LGTBi que «eche a la derecha». Y es que la salida de la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, tras los comicios es la única forma de que «el feminismo llegue también a las instituciones» regionales.

Así lo han manifestado ambas ministras durante un acto de Unidas Podemos centrado en feminismo y que ha contado con el cabeza de cartel electoral, Pablo Iglesias, y varios candidatos de su lista electoral y cargos de este espacio político.

Durante su desarrollo ha habido claras referencias a las amenazas recibidas contra Montero e Iglesias, así como de su decisión de no compartir ningún espacio con Vox tras cuestionar su veracidad y exigir una reacción ciudadana ante la ultraderecha.

LA VICEPRESIDENTA ENTONA «FASCISMO NUNCA MÁS»

Al inicio de su discurso, Díaz ha trasladado que es un buen día para entonar «fascismo nunca más» y que, pese a que ayer fue un día difícil por esas amenazas, que se dirigen también contra la democracia, hay que «pasar página» para dejar patente que «no van a retroceder».

«Nos jugamos nuestros derechos. Hagamos campaña con alegría (…) Ahora sí podemos ganar y hay que salir a ganar», ha proclamado la también ministra de Trabajo para solicitar también a los sindicatos CCOO, UGT y CGT que también movilicen a los trabajadores para que demuestren, con la candidatura de Unidas Podemos fortalecida, ante los que les «odian» por querer «sociedad más justa» y que las mujeres sean «iguales.

También ha relatado que Iglesias y Montero llevan sufriendo cosas que no son «humanamente sorportables» para, a continuación, ensalzar a la titular de Igualdad y proclamar que «sin las mujeres no hay democracia posible».

AYUSO HACE DE MADRID UN LUGAR INSEGURO PARA LAS MUJERES

Por su parte, Montero ha compartido también que el 4 de mayo hay mucho en juego para intentar terminar con 25 años de gobierno del PP, que ha convertido Madrid en su «laboratorio» en el que desplegar sus «experimentos», sus privatizaciones, y su modelo de «sociedad salvaje» mientras cogían «a manos llenas el dinero público».

A su vez, ha comentado que se habla mucho de la «extrema derecha» pero «poco» del modelo político del PP y la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, que «desprotege la vida de las mujeres» y hace que Madrid sea un lugar «inseguro» para ellas.

Concretamente, Montero ha censurado que solo exista un hospital de referencia para mujeres violadas en Madrid y que haya una lista de seis meses de espera en el centro de atención de víctimas de violencias sexuales.

EL PP TIENE ASPECTOS «MÁS PERVERSOS» QUE LA ULTRADERECHA

También ha acusado a Ayuso de «legitimar» a los «cachorros de Vox» que llaman «asesinas» a las mujeres que acuden a clínicas para interrumpir voluntariamente su embarazo y de generar miedo a los «niños, niñas y niñes» que pueden sufrir violencia en las aulas al escuchar a su presidenta «ridiculizar» el lenguaje inclusivo».

En esta línea y tras preguntarse a cuántos profesores se quiere «amedrentar» con la aplicación del ‘pin parental’, que es solo «odio»; la titular de Igualdad ha cargado con el discurso «mucho más perverso de la derecha», que pregona no necesitar el feminismo.

«Si Ayuso es presidenta por el poco tiempo que le queda, es precisamente porque antes ha habido millones de mujeres dejándose la piel, la vida, para que hoy tengamos derechos», ha agregado para instar al tejido asociativo regional, a sindicatos y al feminismo que «arrimen el hombro» en estos comicios.

Y es que Montero ha desgranado que la «extrema derecha y la derecha» han elegido el feminismo como su «blanco de ataque» por ser la «vanguardia» de la «transformación» que llegará a Madrid mediante esa «oportunidad democrática» que es el 4 de mayo. «Si hoy Madrid tiene una oportunidad es por el movimiento feminista, no lo desaprovechemos», ha concluido para apelar al espíritu del 8M y de las movilizaciones en apoyo a la víctima de ‘La Manada’.

También ha tomado la palabra la secretaria de Estado de Igualdad y Contra la Violencia de Género, Noelia Vera, quien ha aludido a las amenazas y ha denunciado que Montero lleva aguantando desde que esta en el Gobierno el «machismo más rancio, cruel y asqueroso» del país que no admite que una mujer valiente les esté gobernando.

«Ayer cambió todo, se le quitó la careta a todo el mundo», ha disertado Vera mientras que la presidenta de En Comú Podem en el Parlament catalán, Jéssica Albiach, también ha dicho que la reacción de Iglesias ante Vox ha sido «un punto de inflexión» en la campaña madrileña.

VOTAR CONTRA LOS QUE QUIEREN MADRID COMO EL ‘CUENTO DE LA CRIADA

A su vez, ha alertado de que si la gente trabajadora, decente y feminista no vota el 4 de mayo, volverá no solo Ayuso y el PP «cínico, soberbio» y que ha desplegado una «gestión criminal de la pandemia», sino «todos» los que quieren a las «mujeres calladas y sumisas como en ‘El cuento de la criada’ (en alusión a la novela de Margaret Atwood)», los que prefieren la «dictadura a la democracia» y son «incapaces de condenar las amenazas. «Aquí nadie se puede poner de perfil porque nos estamos jugando la democracia, es un reto de país y una gran alianza antifascitas», ha reclamado.

La eurodiputada María Eugenia López Palop ha exclamado que la «extrema derecha odia a las mujeres libres» y por eso señalan a Montero, pero ha advertido a los «nostálgicos del franquismo» que las feministas han venido a «joder su plan» de que las mujeres sean «máquinas paridoras».