El consejero vasco de Educación, Jokin Bildarratz, ha advertido de que, aunque el viernes solo había 19 aulas cerradas en Euskadi por covid-19, la cifra se incrementará en próximas semanas, ya que «todo lo que vive la sociedad se traslada a los centros», en relación al incremento de casos positivos.
En declaraciones a Radio Euskadi, Bildarratz ha analizado el impacto de la pandemia y, tras afirmar que el principal objetivo al inicio del curso educativo pasaba por conseguir la «presencialidad en las aulas y terminar el curso escolar», ha puesto «una matricula de honor» a la implicación de la comunidad educativa, que está permitiendo conseguirlo.
Por contra, ha reconocido que la pandemia ha dejado ver una serie de «lagunas» y ha abogado por aprovechar la crisis para «poder crecer» en ámbitos como «la digitalización, la humanidad o la solidaridad».
En este sentido, ha considerado que la brecha digital que podían sufrir algunos alumnos «se ha sabido solventar», gracias también a la aportación de los centros educativos y a la implicación de los ayuntamientos.
Según ha dado a conocer, de las 17.554 aulas que hay en Euskadi, el pasado viernes solo estaban cerradas 19, aunque ha advertido de que «estamos en una ola ascendente y todo lo que vive la sociedad se traslada a los centros». «Veníamos de una Semana Santa que todavía no se ha normalizado y entiendo que en próximas semanas este número se acrecentará incluso hasta el 1% de aulas cerradas», ha incidido.
En esta línea, ha valorado que Euskadi es una de las pocas Comunidades que ha mantenido «presencialidad absoluta en las universidades», lo que ha atribuido a la labor del sistema universitario vasco.
Asimismo, y tras recordar que fue el consejo interterritorial de Salud quien acordó que en el caso de los profesores de centros universitarios estos se vacunen dentro de sus grupos de edad, ha valorado que «la gran mayoría» del profesorado de los centros educativos vascos se ha vacunado, «lo que nos dota de más seguridad a todos los ciudadanos».
Respecto al alumnado, ha reconocido que serán quienes más tarde se vacunen, por lo que en el futuro la tensión se trasladará «a los centros escolares y será donde se puedan dar los positivos».
EBAU
En lo que se refiere a la próxima celebración de la prueba de la EBAU, ha afirmado que se celebrará los días 8, 9 y 10 de junio, y ya se están «adecuando los lugares donde realizarán los exámenes».
Ante la posibilidad de que haya alumnos que en esas fechas sean positivos o estén confinados, ha incidido en que «se busca una solución». «Lo más probable es que cuando se celebre la segunda prueba –el 6, 7 y 8 de julio– quienes no se hubieran podido presentar lo hagan como primera», ha detallado.
Cuestionado por lo que sucedería con quienes no superen las pruebas de junio y no puedan acudir a la convocatoria de julio por los mismos motivos sanitarios, el consejero ha afirmado que se está estudiando la situación que, en todo caso, «suele afectar a pocos casos porque la mayor parte de los alumnos superan la prueba».
Asimismo, ha confiado en que la OPE retrasada el año pasado por la pandemia y que se celebrará finalmente en junio se pueda desarrollar en una mejor situación sanitaria.
En lo que afecta a la reunión que mantendrá el LABI el próximo jueves, el consejero ha afirmado que se adoptarán las «decisiones oportunas», aunque en las últimas reuniones todo lo relativo al ámbito de la educación «no está teniendo gran protagonismo», al estar «el curso más o menos enfocado y los protocolos asentados».
HUELGA
Por último, Bildarratz se ha referido a la jornada de huelga convocada en el sector público para el próximo 22 de abril y ha confiado en que no cuente con amplio respaldo entre el profesorado.
«Los centros escolares son ámbitos de igualdad… En una situación de crisis los alumnos están más seguros en los centros. Todo lo que sea romper con esa dinámica, desde el punto de vista educativo no es bueno, aunque desde el punto de vista laboral los sindicatos tienen toda la legitimidad para reivindicar», ha concluido.
