En el mundo del tenis no existe nadie mejor en la tierra batida de Montecarlo que Rafael Nadal, un hecho que fácilmente se puede comprobar con los 11 títulos que tiene en sus vitrinas de este torneo. Sin embargo, una de esas sorpresas que suele ocurrir muy poco se dio en los cuartos de final de esta edición de 2021, en la que el mallorquín se enfrentó ante Andrey Rublev que estuvo pletórico en todo momento. El ruso se impuso de gran forma, por 6-2, 4-6 y 6-2, en un duelo que se extendió por dos horas y 32 minutos, y del que además se pueden sacar varias conclusiones.
Esta claro que el partido de Nadal estuvo horrible, pero enmarcar su derrota en solo un mal día sería una falta de respeto tanto con él mismo como con el rival. Tal como mencionó el manacorí en rueda de prensa, su caída es un cúmulo de cosas que sucedieron en la pista y que también se han venido acumulando a lo largo de las últimas semanas. No obstante, eso no lo exime de la dureza con la que perdió y aunque todo le sirve como combustible para coger fuerza de cara a lo que será su nuevo asalto al Roland Garros, mucho tendrá que trabajar para revertir todo lo malo que hizo en este Master 1000 de Montecarlo del que se bajó de muy mala forma.
3A Nadal le falta aún ritmo de juego
Al finalizar el choque, Nadal explicó en rueda de prensa que su falta de ritmo de juego no tuvo nada que ver en su derrota; porque según explicó, el entrenamiento que hizo luego de recuperarse de su lesión, lo hizo de forma concienzuda para ganar en Montecarlo, por eso no lo pondría como excusa. No obstante, solo hace falta ver su juego y como terminaron uno y otro para entender que si tuvo mucho que ver su falta de ritmo competitivo. Aunque es verdad que Rublev tiene 23 años, lo cierto es que se pegó una paliza para vencer a Bautista y aún así se vio mucho mejor que un Nadal que se deshizo de sus dos rivales anteriores, Delbonis (6-1 y 6-2) y Dimitrov (doble 6-1), muy fácilmente; el contraste es muy alto y aún así el ruso estuvo impecable.
Esto también se puede deber a que Nadal solo ha disputado cinco duelos, divididos en cuatro victorias y una derrota, y en Montecarlo solo pudo disputar tres más, así dejó un registro de 6-2. En realidad ocho duelos es muy poco bagaje para el tenista español; por lo que la falta de minutos en cancha y de batallas contra rivales competitivos si que puede haber afectado. Algo que se evidencia aún más si se tiene en cuenta que el balance de Rublev es de 23-4 en esta campaña, un registro que ahora es el mejor entre todos los tenistas. El ritmo competitivo si que importó y en este caso fue el ruso el que en mejor forma estaba. Ya a Nadal solo le queda seguir preparándose, pues tras ganar su trofeo número 13 de Roland Garros el año pasado, si que deberá trabajar para lograr el 14.