La música puede llegar a ser una herramienta para deshacernos del estrés en momentos de tensión, así como también la mejor compañía cuando se requiere realizar alguna actividad, inclusive hasta nadar, porque ya hay auriculares acuáticos. En ocasiones puede servir como motivación o como un impulso extra cuando (por ejemplo) realizamos ejercicio, limpiamos el hogar, o realizamos tareas domésticas que se vuelven más llevaderas con una presencia musical, además hay zonas del cerebro que se activan cuando la escuchas.
Sin embargo, no todas las actividades se prestan para ser acompañadas por música, y es que aunque muchas personas afirmen que estudiar o trabajar con música puede ser beneficioso para ellos, otra gran cantidad de individuos opinan lo contrario, lo que crea una disputa entre quién está bien, y quién está mal.
3Los experimentos
Los investigadores encargados del experimento realizaron pruebas a una determinada cantidad de individuos. En estas pruebas, se realizaban experimentos relacionados con palabras y creatividad. En uno de los mismos, la prueba consistía en darles una serie de palabras a las personas para luego pedirles que hallaran un vocablo que se pudiera combinar con el resto de las mismas y así, crear conceptos triviales.
Mientras se realizaba el experimento, a las personas se les estudió cómo trabajaban con música de fondo, y cómo lo hacían sin ella (esto sin importar de qué tipo era). ¿Cuál fue el resultado? Cuando se utilizó la música como fondo, los individuos comenzaron a empeorar en sus resultados experimentales.
Esto se debe a que según los científicos, la música posee el poder de interrumpir la memoria de trabajo en cuanto al campo verbal, por lo tanto, es una piedra en el zapato para el rendimiento cognitivo.