La música puede llegar a ser una herramienta para deshacernos del estrés en momentos de tensión, así como también la mejor compañía cuando se requiere realizar alguna actividad, inclusive hasta nadar, porque ya hay auriculares acuáticos. En ocasiones puede servir como motivación o como un impulso extra cuando (por ejemplo) realizamos ejercicio, limpiamos el hogar, o realizamos tareas domésticas que se vuelven más llevaderas con una presencia musical, además hay zonas del cerebro que se activan cuando la escuchas.
Sin embargo, no todas las actividades se prestan para ser acompañadas por música, y es que aunque muchas personas afirmen que estudiar o trabajar con música puede ser beneficioso para ellos, otra gran cantidad de individuos opinan lo contrario, lo que crea una disputa entre quién está bien, y quién está mal.
2Todos los tipos de música tienen el mismo resultado
Esto es un punto de suma importancia, y es que puedes llegar a pensar que quizás una canción interpretada en un idioma desconocido donde solo escuchas lo que para ti son onomatopeyas, o música instrumental sin ningún cantante presente puede presentar resultados diferentes, lo cual es errado.
Esta investigación de los psicólogos indica que independientemente del tipo de música, esta, al estar presente, arroja “un estímulo sensorial que influye en el rendimiento cognitivo de las personas”, tal y como lo aseguran los miembros del medio Xataka. Esto demuestra que no importa si te sabes o no la canción de cabo a rabo, de igual manera te afectará.