La manzana es una fruta muy usada en la cocina, puede ser en un dulce o en comida salada, incluso en una salsa para acompañar carnes, puesto que su sabor es bastante ligero pero que se hace presente.
La manzana
La manzana es el fruto comestible de la especie Malus doméstica, llamada comúnmente manzano. Es una fruta pomácea de forma redonda y sabor más o menos dulce, dependiendo de la variedad y asadas son el dulce más saludable para comer todos los días.
La temporada de manzanas
El fruto madura a finales del verano o del otoño, y los cultivares existen en una amplia gama de tamaños. Los cultivadores comerciales tienen como objetivo producir una manzana de 7 a 8,5 cm (2¾ para 3¼ en) en diámetro, debido a la preferencia del mercado.
Algunos consumidores, especialmente los de Japón, prefieren una manzana más grande, mientras que las manzanas por debajo de 5,5 cm (2¼ en) se utilizan generalmente para hacer jugo y tienen poco valor fresco de mercado.
Componentes de la manzana
- Pectinas: Actúan como una fibra soluble. Ayudan a la disolución del colesterol y constituyen compuestos de interés en la lucha contra la diabetes.
- Aminoácidos: Cisteína (componente de los tejidos, elimina las toxinas del hígado); glicina (antiácido natural y responsable del sistema inmunitario) arginina (necesaria para el crecimiento muscular y la reparación de los tejidos, responsable junto a la glicina del sistema inmunitario).
- Histidina (vasodilatador y estimulador del jugo gástrico: Combate la anemia, la artritis y es muy útil para las úlceras). Isoleucina (necesaria para un crecimiento adecuado y para el equilibrio del nitrógeno).
- Lisina (interviene en la producción de anticuerpos, la construcción de los tejidos y la absorción del calcio). Serina (ayuda a fortalecer el sistema inmunitario). Valina (favorece el crecimiento infantil e interviene en el equilibrio del nitrógeno). Metionina (necesaria para la producción de la cisteína, ayuda a combatir el colesterol)
- Ácidos: glutamínico (antiulceroso, tónico, incrementa la capacidad mental), linoleico (Vitamina F), málico, oleico, palmítico y cafeico.
- Azúcares: fructosa, glucosa y sacarosa.
- Catequinas
- Quercetina
- Ácido ursólico
- Sorbitol
- Fibra
- Elementos: calcio, hierro, magnesio, nitrógeno, fósforo, potasio y zinc.
Propiedades y beneficios del consumo de la manzana
- Contiene mucha agua, más del 80% de su peso.
- Contiene varias vitaminas, A, C, B1, B2 y E
- Baja en hidratos de carbono
Tipos de manzanas
Ralls Genet:
Su cultivo lo popularizó Thomas Jefferson, el tercer presidente de los Estados Unidos, aunque fue realmente Edmond-Charles Genet quien otorgó esta variedad al presidente, de ahí su nombre. Su color varía entre el rojo y el amarillo, su piel es brillante y su textura crujiente. Válida tanto para comer en crudo como para el cocinado.
Fuji:
Proviene del cruce de dos variedades estadounidenses Ralls Genet y Red Delicious. Realmente es un clon que se realizó en la ciudad de Fujisaki en Japón, de ahí su nombre. Su sabor es dulce, su textura jugosa y crujiente. El color puede variar pero oscila entre el rojo y el rosa. Al morderla empapa la boca con el agua fresca que contiene. Es muy recomendable su uso en ensaladas y repostería, al ser muy dulce también es una opción perfecta para comer en crudo.
Golden:
Tiene su origen en el estado de Virginia (EEUU) y fue descubierta por Anderson H. Mullins en 1980. Se trata de un cruce entre las variedades Grimes Golden y Golden Reinette. Tiene un color amarillento con toques dorados. Además destaca por su sabor ácido que desaparece cuando madura, convirtiéndose en dulce y su textura crujiente. La mejor forma de introducirla en las comidas es en los postres como tartas o bizcochos.
La variedad de este tipo de manzana es muy amplia. Podemos encontrar en el mercado algunos ejemplares como Golden Delicious Cosel (Virginia), Smoothee (Pensilvania), o las Pink Gold, Lyros o Rosagold, que son las variedades francesas.
Granny Smith:
Granny Smithes una manzana con abuela: Maria Ann Smith Sherwood, la mujer que popularizó esta variedad de manzana en Australia a mediados del siglo XIX y que le da nombre. Su color es verde y su textura crujiente, debido a su piel gruesa y su carne dura. Normalmente da un toque fresco a los platos.
Por qué deberías probar esta receta
- No contiene azúcar.
- No contiene lácteos.
- La base de la compota es la fruta y nada más.
- Pocos ingredientes y muy asequibles.
- Tiene muchos usos.
Ingredientes
- 1 kg de manzanas (alrededor de 5 manzanas) tipo Golden, aunque realmente puedes utilizar la variedad que más te guste. Dado a que la la compota es sin azúcar, cuanto más dulces y maduras sean las manzanas mejor.
- El zumo de medio limón.
- 3 cucharadas de azúcar blanco, o nada de azúcar si quieres prepararla sin azúcar.
- 1 ramita de canela. También puedes aromatizar si lo prefieres con vainilla, ya sea con las semillas de una vaina o con un poquito de esencia líquida de vainilla.
Elaboración
Pela las manzanas y quítales el corazón (si, pártelas en trocitos y ponlas en la olla que vayas a utilizar. Vierte por encima el zumo de limón y remueve las manzanas para que se impregnen bien.
Si vas a aromatizar con vainilla es mejor añadir las semillas o la esencia cuando ya esté lista la compota, al final del proceso. Pon la olla a fuego medio hasta que el líquido que van expulsando las manzanas empiece a hervir.
Cuando eso ocurra, tapa la olla con su tapadera, baja el fuego al mínimo y deja que se cocine entre 30 y 40 minutos para que la manzana esté blandita.
El tiempo dependerá de la variedad de manzana (hay unas que tardan más y otras menos) y de tu gusto, ya que hay quien prefiere que la manzana todavía esté en trocitos para utilizarla por ejemplo en un postre pero también es posible que te guste muy hecha para después triturarla, así que cuando lleve 30 minutos vigila el punto que tiene y retírala del fuego cuando prefieras.
Cuando la retires del fuego, si tu idea era aromatizarla con vainilla ahora es el momento de incluirla, y si la has aromatizado con canela retira la rama.
Puedes dejarla así para que quede en trocitos pero también puedes chafarla con un tenedor para que quede una textura rústica o bien con una batidora de mano, de vaso o robot para conseguir una textura fina y cremosa, a tu gusto.