El secretario general de CCOO, Unai Sordo, ha pedido este martes a CEOE que «se remangue» y se ponga «en serio» a renovar el Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC), que, desde su punto de vista, no puede limitarse a una negociación de carácter salarial.
Así lo ha señalado durante una rueda de prensa para presentar el balance de la negociación colectiva de 2020 y del IV AENC, que tenía vigencia de 2018 a 2020.
Para Sordo, es «el momento de facilitar criterios, protocolos y buenas prácticas». El líder sindical ha reconocido que el AENC de 2020 ha estado totalmente influenciado por la pandemia y que ha dificultado su normal desarrollo en términos económicos, sociales y logísticos.
«No es fácil negociar un convenio cuando la movilización está tan seriamente restringida como lo ha estado a lo largo de 2020», ha dicho, tras afirmar que, pese a la «difícil situación pandémica» se ha conseguido, a través de la negociación colectiva, que se mejore el poder adquisitivo al menos de los convenios colectivos suscritos.
También ha aprovechado para afirmar que los acuerdos por el empleo y la negociación colectiva «se han demostrado como una buena herramienta para orientar las políticas laborales».
De hecho, ha puesto en valor que el IV AENC supuso «un punto de inflexión en la deriva que las políticas salariales estaban teniendo en España, porque el país llevaba tres años en los que le costaba que el crecimiento económico se tradujera en una mejora de salarios.
«Desde este punto de vista y teniendo en cuenta que todo el mundo coincide que estamos en un momento de enrome importancia, es necesario abordar la negociación de renovación del AENC», ha resaltado, tras señalar que «sería incomprensible que en un momento histórico una herramienta orientativa como el AENC se quedase bloqueada por cortoplacismos de los intervinientes».
Además, ha incidido en lo necesario que es incrementar la senda de los salarios más bajos y que, para ello, se necesita el concurso de la AENC y del salario mínimo interprofesional. «La subida del SMI es inexcusable en España», según Sordo, que ve necesario revertir la situación y derogar lo aspectos más lesivos de esta reforma laboral.
Por otro lado, ha denunciado la generalización de las inaplicaciones en el país, que han sido propiciadas por la reforma laboral, ya que «abrió toda una gama de posibilidades para que las empresas dejasen de aplicar lo que se pacta».
«Hay que establecer procedimientos que permitan acotar cuando hay razones económicas que justifiquen algún tipo de estas medidas y, sobre todo hay que apostar por acabar con la rotación laboral», según Sordo, que cree que existe riesgo de que, en la segunda parte del año haya una devaluación salarial.
De hecho, considera que «se está filtreando con un riesgo» y que «el riesgo es que las empresas y sectores que se han acogido durante mucho tiempo a expedientes de regulación temporal de empleo (ERTEs) estén trabajando y recuperando la actividad con menos plantilla».
También ha criticado que la posición empresarial «está sufriendo una regresión en los últimos meses» y está diciendo que no hay que hablar de cosas que firmaron hace tres años.
«Esto nos preocupa de sobre manera, es verdad que se firmaron con redacciones que pueden tener su punto de interpretación, pero cuando se dice que las partes firmantes compartimos la necesidad de que cuando en periodos de negociación estos conserven su vigencia, parece evidente que se está enmendado la ultractividad de duración tasada en un año», ha dicho.
Además, ha apostillado lo necesario que es avanzar en la mejora de los salarios en España y retomar la agenda. «Empieza a ser factible que en la parte final del verano tengamos un nivel de vacunación que permita recuperar buena parte de la movilidad económica en España y, si esto es así, vamos a ir a un ciclo de crecimiento económico muy intenso para el que se requiere un modelo laboral distinto», según Sordo.