El mundo de MotoGP parece brillante desde afuera, pero como cualquier deporte tiene algunos fallos importantes; el último lo expuso Francesca Sofía. La novia de Valentino Rossi trabajó como azafata cuando tenía 19 años; ahora con 27 años y una carrera más productiva, en parte gracias a su relación con el piloto italiano, la modelo confesó que se sentía muy orgullosa de su etapa en el paddock y lo que allí había hecho, pues no solo le permitió conocer al amor de su vida, también le abrió puertas en lo profesional; no obstante, en la entrevista también dijo que el machismo y los abusos que allí se dan son para tener miedo.
«Te miran el trasero cuando pasas y te lo tocan cuando te tomas una foto con ellos. Es un entorno masculino. Tienes que espabilar. No puedes ser sólo una cara sonriente. Tienes que aprender a ser respetada. Si sólo te muestras bonita y estúpida estás acabada», comentó Francesca Sofía para ‘Vanity Fair’. Pese a todo, su estancia allí le permitió darse a conocer al mundo y ahora es una modelo e influencer muy importante. Aunque la modelo ya ha dejado eso atrás, recuerda lo vivido y sabe que las cosas allí deben mejorar; pero ahora se concentra en su prolífica carrera, en la que sus posados candentes son toda una sensación en Internet. Su fama sigue creciendo como la espuma y con sus fotos, en las que aparece tan hermosa, no tardará en seguir ganando seguidores.
4Esa hermosura que no deja de impresionar
Lo cierto es que Francesca Sofía acumula muchas cualidades que la hacen una influencer muy buena y una espectacular Wag, aunque uno de sus mayores atributos es que sin exhibirse mucho puede lucirse de gran forma; es decir, que su belleza es muy natural. La verdad es que Valentino Rossi puede sentirse afortunado de haber conseguido a semejante mujerón, pues además de bella es centrada, tal como expresó en la entrevista; pero además no pierde ese toque seductor, sin importar la pose y la ropa que tenga puesta. En esta foto se puede notar que sus curvas son dignas de admiración, algo que resaltan sus jeans y ese top blanco de mangas largas. Esa mirada misteriosa completa una foto muy artística en blanco y negro digna para el recuerdo.