El Teatro Real de Madrid ha destacado este viernes que invirtió desde que reabrió tras la pandemia cerca de un millón de euros para «garantizar la seguridad y la salubridad de su personal, los artistas y el público» y así «contribuir y ser parte activa» de la «cultura segura».
En este contexto, el coliseo madrileño ha desgranado que empleó 80.000 euros para mascarillas «obligatorias y permanentes en todo el teatro, incluidos los ensayos y funciones», a excepción de los solistas, y dedicó 241.519 euros en 4.882 pruebas para la detección de la Covid, «test que continuarán haciéndose sujetos a las directrices que las autoridades sanitarias sugieran».
El Teatro Real ha detallado que en las vísperas del estreno de la producción de ‘Peter Grimes’, que tendrá lugar el próximo 19 de abril, la situación sanitaria a fecha de hoy «está controlada» y solo se ha detectado, en 452 pruebas, un caso positivo, el pasado 5 de abril, que está aislado.
Así, ha señalado que desde la vuelta de vacaciones de Navidad hasta el 8 de abril, «se han hecho 2515 pruebas al personal del teatro, tanto técnicos como de oficinas y a los diferentes elencos artísticos«. «En ese tiempo se ha detectado un brote en el pasado mes de marzo, en el que se realizaron 1077 test, con un saldo de 15 positivos entre solistas, actores, personal de producción artística y oficinas», ha recordado.
El Teatro Real ha explicado que en los ocho días que han transcurrido del mes de abril se han realizado un total de 452 pruebas, con el resultado de un único positivo en el elenco, lo que «pone de manifiesto el riguroso cumplimiento del Plan Marco de Control de COVID 19 del Teatro Real que establece la periodicidad de las pruebas a sus empleados y elencos».
Además, se realizaron 2727 test (una media de entre 9 y 10 pruebas a cada uno) a los elencos artísticos de ‘Un ballo in maschera’, ‘Rusalka’, ‘Don Giovanni’, ‘Norma’, ‘Siegfried’ y ‘Peter Grimes’, compuesto por un total de 283 personas. «El Teatro continuará, como ha venido haciendo desde que reabrió tras la pandemia, realizando pruebas periódicas en cumplimiento de su riguroso protocolo, función tras función», ha defendido.