La tecnología ha permitido que los procesos de las empresas se simplifiquen y sean mucho más ágiles. Por ejemplo, el código de barras ean 13 es muestra de ello durante la compra venta. Permite almacenar la información de un producto para ser leída a gran velocidad con un lector láser.
Esta iniciativa surgió en Europa en el año 1979. El EAN se aceptó como identificador de productos de consumo. Un estándar, que hoy por hoy, ya se acepta en casi todos los países del mundo. Se puede decir que ofrece excelentes oportunidades para maximizar la eficiencia de las bases de datos en las operaciones habituales de intercambio de artículos.
¿Qué es el código de barras EAN 13?
El código de barras EAN-13 es muy utilizado en los supermercados y establecimientos de venta al por menor con el objetivo de identificar la información de un producto. EAN significa European Article Number (número de artículo europeo), pero cabe destacar que se puede usar fuera de Europa.
Este código de barras almacena un total de 13 dígitos. Los primeros dos dígitos son prefijos GS1 que sirven para identificar al país de origen del producto. También se incluye un número de empresa de cinco dígitos para conocer la marca, seguido de un número de artículo para el producto. Debajo, hay un número de comprobación para garantizar la precisión del código. Finalmente, se reconoce un símbolo > que indica una “quiet zone” para señalar el final.
Por lo tanto, las compañías y empresas tienen la posibilidad de mejorar el control de calidad y el servicio al cliente. Es tal la precisión y contabilidad en los datos de la información que se reducen los errores en gran medida.
Uso y ventajas del código de barra EAN 13
El uso de EAN-13 es muy popular y útil para operaciones minoristas porque se puede leer por cualquier lector de código de barras. Además, el número de comprobación también contribuye a garantizar la precisión si se opta por ingresar el código de manera manual.
La combinación de diferentes letras y números posibilita la consecución de un resultado específico por dígito. Si este no coincidiera con el resultado se debería principalmente a que se ha introducido de forma incorrecta.
Asimismo, existe una versión corta que permite codificar solo ocho dígitos. Se divide en dos conjuntos de cuatro para señalar el país de emisión del código de barras, cinco dígitos para identificar el producto, y finalmente, un número de verificación. Las ventajas del código EAN 8 es el ahorro de espacio y la exactitud en el ingreso de forma manual.
Los beneficios de usar los códigos de barras son múltiples; no obstante, enumeramos algunos de estos:
- Identificación mundial de un producto.
- Reducción de costes en la impresión y reparto del almacenamiento.
- Mejora la comunicación entre el proveedor y cliente.
- Facilidad para conocer la fecha de caducidad del artículo.
- Mayor agilidad en el inventario.
- Facilita el trabajo al empleado porque no tendrá que aprenderse todos los precios.
- Mejora la competitividad empresarial.
En definitiva, los códigos de barras mejoran el proceso de compraventa de cualquier artículo. Su productividad y efectividad tanto para el empresario como consumidor están garantizadas y comprobadas.