La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, han exigido de forma conjunta al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que rectifique el «injusto» cierre de la estación de esquí de Navacerrada.
Tras hablar en el mismo Puerto de Navacerrada con trabajadores, deportistas y hoteles afectados por el cierre, ambos dirigentes han comparecido juntos ante los medios de comunicación.
En su intervención, la dirigente madrileña ha hecho hincapié en que a las personas que ya están en paro con el cierre de manera «arbitraria» de esta estación se le sumarán «otras muchísimas». Concretamente, son más de 300 las afectadas y más de 5.000 las que tendrán muchas dificultades para llegar a fin de mes. Este es el precio que se va a pagar por cerrar estas pistas en esta estación y mandado a la gente a la calle», ha denunciado.
Para Ayuso, esta decisión «solo tiene una explicación política e ideológica». Así, la ‘popular’ ha criticado que el Gobierno tome «una serie de decisiones sin consenso y sin contar con los verdaderos gestores de esta estación, que no solo son las personas que trabajan en ellas sino también las dos comunidades autónomas».
La jefa del Ejecutivo madrileño ha explicado que «se han alegado unas supuestas razones jurídicas que son falsas porque no hay más que motivación política». A su parecer, la decisión de culpar a Castilla y León es «una farsa».
En este punto, ha recordado que el Plan de Ordenación de la Sierra de Guadarrama contempla la existencia de pistas de esquí compatibles con el medio ambiente. Representan el 0,02% de la superficie del parque lo que es, según la presidenta, «insuficiente a la hora de afectar supuestamente al mismo».
«EL CAMBIO CLIMÁTICO NO PUEDE SER EL MOTIVO POR EL QUE SE CIERRA»
«El cambio climático no puede ser el motivo por el que se cierra si no el Gobierno debería cerrar las 38 estaciones de esquí que hay en todo el país como tampoco es cierto poner como justificación el tráfico, porque solo el 5% de los ciudadanos que transitan por la zona lo hacen para practicar esquí», ha detallado.
Ayuso ha trasladado que considera que la decisión política se toma contra dos comunidades de distinto signo político y que son en muchos casos «contrapunto a las políticas que se están efectuando en el Gobierno de España». «Hemos apostado siempre por la economía pero una economía que fuera compatible con el medio ambiente», ha dicho, al tiempo que le ha pedido que «reconsidere» la decisión.
La presidenta madrileña ha avanzado que, tal y como están haciendo en Castilla Y León, van a estudiar la posibilidad de declarar Bien de Interés Cultural (BIC) esta estación. En caso de no poder, también estudian solicitarlo a las autoridades competentes para proteger en Madrid aquel patrimonio que «es bueno y beneficioso para todos».
ES UNA «AGRESIÓN»
Mañueco ha sostenido que este cierre decretado por el Gobierno de Sánchez supone «cercenar el futuro socioeconómico de toda la zona de Navacerrada, tanto en la Comunidad de Madrid como en Castilla y León (Segovia)». Se trata, a su parecer, de una decisión «unilateral» y «una agresión al mundo rural, al turismo, al deporte y al empleo vinculado a esta estación de esquí».
«No hay ninguna norma en Castilla y León que impida la continuidad de esta estación de esquí, con esta decisión de cierre no se resuelven los problemas estructurales que tiene este entorno privilegiado y para el que se ha creado un grupo de trabajo desde el Patronato del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama», ha expuesto.
El presidente regional ha señalado que Sánchez debe «rectificar su decisión y permitir con la continuidad de las pistas que sigan trabajando medio millar de personas de forma directa y muchísimos más de forma indirecta».
Además, ha sostenido que esta decisión va contra el reto demográfico y ha remarcado que desde su autonomía están «hartos» de medidas ineficaces por parte del presidente del Gobierno. «Es el caballo de Atila, que donde pisa no vuelve a crecer la hierBa», ha remarcado.