La revolución de entretenimiento que hemos podido tener de la mano de David Broncano y Pablo Motos es uno de los ejemplos más resaltantes del medio televisivo. Tanto La Resistencia como El Hormiguero se han ido ganando un espacio de gran importancia en el gusto de las personas. Pues sí, es algo que nadie puede poner en tela de juicio, y mucho menos teniendo el bagaje que lucen cada una de estas personalidades que se han metido a la gente en el bolsillo. Por supuesto que los dos son competencia, y en el campo de batalla que es el plató son grandes, pero hay uno de los dos que gana menos adeptos.
Y esto puede leerse en varios sentidos. Hablamos del abordaje, la forma de las entrevistas, unos que otros detalles que ponen en jaque a los invitados, dejando a su adversario un poco más dócil en ese tema. La juventud de David Broncano es un punto a favor, lo cual ha sido clave en La Resistencia. Pero lo cierto es que El Hormiguero sigue dando guerra. Y a pesar de las críticas que puedan hacerse a este programa, hay cosillas donde La Resistencia tiende a ser más cruel que el show de Motos.
3David Broncano conoce el tema mediático como la palma de su mano
Con el auge de las redes sociales, los programas tienen que apuntar a la innovación y no quedarse dormidos. Hoy en día con tanta diversidad, las personas rápidamente pueden cambiar el canal. Por eso, David Broncano aprovecha su humor, a veces ácido, para captar a los televidentes y engancharlos en su programa.
En cambio, El Hormiguero sigue en esa línea un poco menos mediática con Pablo Motos, en compañía de sus hormigas que son todo un referente, que a pesar de despertar sensación, resultan menos dolorosas si lanzan un comentario fuera de lugar a lo que puede provocar David Broncano.