Desde el inicio de la pandemia, el teletrabajo se convirtió en una realidad que hasta ahora muy pocas empresas habían utilizado en nuestro país, pero tiene truco, y por ello vamos a ver el motivo por el que no debes teletrabajar en pijama. El teletrabajo se veía como la panacea para evitar el madrugón, la ducha justo al despertar pelándonos de frío, tener que vestirnos y coger el coche para ir a la oficina. El tiempo fue pasando y se vio que esto no era tan así, ya que se perdía mucho tiempo en cosas que nos distraían, no éramos productivos y perdíamos capacidad de decisión en lo que al trabajo respecta. Los expertos comenzaron a dar su opinión sobre el teletrabajo y algunos consejos que vamos a ver en este artículo, pero sobretodo, por qué debemos desechar la idea de teletrabajar en pijama.
Veamos cuáles son algunos de los motivos:
4Puede influir en nuestro rendimiento
Puede parecer algo extraño, pero los expertos en teletrabajo inciden en que vernos bien influye sobremanera en la salud mental aunque no sea algo que nos preocupe mucho. Vernos bien hace que nos sintamos bien con nosotros mismos, y por ende hará que trabajemos mejor. Si nos ponemos a trabajar frente al ordenador en el salón de nuestra casa, sentados en el sofá o con música, es inevitable que a los 5 minutos estemos cansados, distraídos o muy aburridos, por lo que seremos menos productivos, pero no solo eso, sino que las jornadas de trabajo se nos harán imposibles.
Vestirnos profesionalmente nos pone en un estado mental diferente, nos ayuda a concentrarnos mejor, al igual que si vestimos de deporte, probablemente, estaremos más predispuestos a dar un paseo
No solo es importante vestirse y quitarse el pijama para teletrabajar, sino que es igualmente importante el hecho de volver a ponernos el pijama, o el chándal o lo que queramos, al final de la jornada de trabajo. Este simple hecho nos ayuda a desconectar del trabajo y es una forma de decirle a nuestro cuerpo que se acabó y que ya puede descansar.
