En el FC Barcelona actual, poco se puede hablar de intocables más allá de Lionel Messi; pero uno que se lo ganó a pulso fue Frenkie de Jong con sus últimas actuaciones. Cierto es que al ser joven todavía puede seguir evolucionando; no obstante, Joan Laporta, que recién acaba de llegar a la presidencia de la institución catalana, ya ha declarado al mediocampista una de las piezas más importantes de cara al futuro. De este modo, De Jong es uno de los futbolistas que no está a la venta y sobre el que hay puestas muchas esperanzas en la renovación de un equipo que necesita varios refuerzos; pero que dentro de la plantilla ya hay algunos cracks con los que contar.
Si bien el equipo ha ido mejorando con el paso de los partidos, al punto de que ahora aspira al doblete de Liga y Copa del Rey; la realidad apunta a que Ronald Koeman deberá recibir varios refuerzos de cara a la próxima campaña. Sin embargo, las dificultades económicas, ocasionadas por la enorme deuda que tiene el club blaugrana, impiden que se puede soñar con grandes fichajes. Por mucho que la prensa insista o que Laporta no lo quiera admitir, fichar un crack sería muy peligroso; así que muchos se estaban planteando algunas ventas para recaudar fondos, algo en lo que el nuevo mandatario ya ha pedido tener mucho cuidado, pues no todos están a la venta. Uno de los nombres que sobresalía era el de De Jong; pero todo ha cambiado en los últimos meses y el neerlandés a pasado de ser un fracaso a un intransferible.
1Una primera campaña para el olvido
La evolución del mediocampista ha sido muy pausada y, a pesar de las dificultades ya ha logrado borrar esa aura negativa que lo rodeaba. No obstante, las cosas si que comenzaron mal para un De Jong que ha tenido que remar mucho para revertir toda la situación que comenzó cuando lo trajeron por un gran precio. Josep Maria Bartomeu volvió a asistir al mercado en el 2019 para fichar por 75 millones de euros a esta joya del Ajax que justo venía de deslumbrar tanto en la Eredivise como en la Champions League. Aunque a todas luces era un pésimo negocio que en lo económico, pues Bartomeu parecía que nunca trabajaba a favor del Barça, en lo deportivo si que era uno de los más esperados; esto debido a que su calidad y estilo de juego se adecuarían muy bien al equipo azulgrana.
Todos esperaban ver desde el inicio a ese centrocampista atrevido, que lo mismo iniciaba la jugada saliendo con el balón entre los dos centrales, como que finalizaba dentro del área rival para acabar anotando para los suyos. Las expectativas eran altas y lo peor de todos es que De Jong no pudo cumplir con ninguna de ellas. En su primera campaña de blaugrana no pudo decepcionar más; porque aunque el equipo no se quedó sin ganar ningún título por su culpa, la verdad es que tampoco contribuyó mucho para revertir esa situación. Sin trascendencia en el juego, sin aparecer en jugadas importantes y sin esa chispa para crear en ataque; todo para el neerlandés se cayó y al final de temporada ya muchos lo consideraban uno de lso grandes fracasos que había en el equipo.