El Gobierno venezolano ha expresado este domingo su rechazo a la decisión de Facebook de suspender durante 30 días la cuenta del presidente Nicolás Maduro por incumplir las normas sobre difusión de información sobre el coronavirus tras la publicación de un vídeo en el que defendía el antiviral «milagroso» Carvativir.
Maduro destacó la eficacia de este medicamento, una solución oral derivada del tomillo que neutralizaría el coronavirus sin efectos secundarios, una afirmación sin respaldo científico. Además, Maduro asegura que el Carvativir se puede utilizar de forma preventiva y terapéutica.
Al conocerse la noticia, el mandatario ha anunciado que transmitiría su habitual y diaria rueda de prensa sobre la situación del coronavirus en el país a través de otra cuenta de la red social, donde ha explicado que «Facebook, de manera totalitaria y abusiva, me censuró sin aviso y sin protesto», recoge la cadena nacional de televisión.
«Ellos se creen que están por encima de la Constitución de los países, de las leyes y el derecho internacional, por encima del derecho a la libertad de expresión. Pero seremos un hueso duro de roer, Facebook, te metiste con los revolucionarios de Venezuela», ha denunciado Maduro.
El presidente ha transmitido la conferencia a través de la cuenta de su esposa, Cilia Flores, y ha expresado su «esperanza» de que Facebook «no bloquee ni cierre la cuenta de la Primera Combatiente».
Por otro lado, ras la suspensión, el Ministerio de Comunicación e Información venezolano ha publicado un comunicado en el que rechaza esta «nueva arbitrariedad» que, asegura, «incurre en la violación de los artículos 57 y 58 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela.
Con la suspensión, Facebook vulnera «el derecho de 1,2 millones de usuarios y usuarias de dicha cuenta, a la información veraz y oportuna», según el Gobierno venezolano. Además, el Ministerio ha subrayado que la suspensión se debe al hecho de «presentar públicamente el retroviral, de ingeniería y producción nacional, Carvativir, y su plan de distribución masiva y gratuita en todo el país».
«No es la primera vez que la empresa Facebook y sus asociadas (Whatsapp e Instagram) se abrogan el derecho de silenciar y sancionar, discrecionalmente, los contenidos que el Jefe de Estado publica diariamente en el uso ético de la libertad de expresión, pensamiento y opinión relativos a las políticas de Estado y que son de alto interés público para Venezuela y el mundo», ha argumentado el Ministerio.
En particular, critica «que, en una suerte de tiranía del algoritmo, se persiga principalmente aquellos contenidos orientados al combate de la pandemia y que son de interés científico y por tanto urgentes para la salud de la humanidad».
«Esto constituye no sólo actos de censura, propios de una nueva dictadura mediática, sino que evidencia a su vez una extensión del bloqueo y boicot que el imperio norteamericano aplica de manera ilegal contra nuestro pueblo para consumar el llamado ‘cambio de régimen’ por la fuerza», ha añadido el Ministerio.
Además, denuncia que antes de ser informados los administradores de la cuenta de Maduro, esa información «confidencial y privada según la normativa de la empresa» fue suministrada sin consentimiento alguno a la agencia de noticias Reuters, «quien se encargó de darle un matiz de discriminación política.
Venezuela denuncia así un «totalitarismo digital ejercido por empresas supranacionales que quieren imponer su ley a los países del mundo».