Se le conoce como reserva natural o reserva ecológica a un espacio protegido, en el cual se preserva la vida silvestre, la fauna y la flora. Estas áreas son de especial interés para el hombre, por lo cual han sido creadas con el objetivo de conservar y proveer la oportunidad para poder investigarla y fines educativos.
Para que una reserva natural sea reconocida debe pasar por el acuerdo de diversos gobiernos, así como de los organismos patrimoniales internacionales, quienes serán los encargados de determinar si dicha biosfera es particularmente importante como para su preservación.
Por lo general, entre los criterios usados por las instituciones para la selección de un territorio suelen estar relacionados con la presencia de especies endémicas, como animales, plantas y otras especies, así como las zonas geológicas que puedan ameritar la preservación del terreno. Por lo general se busca proteger estos espacios y la vida que contienen de las actividades de explotación humana.
Todas las reservas naturales son consideradas parte del Patrimonio de la Humanidad, por lo que si bien permiten el disfrute ecológico de todas y cada una de las personas del mundo, estos terrenos continúan bajo unas estrictas políticas de conservación.
En la mayoría de los casos, las reservas naturales son refugios para un gran número de especies de plantas y animales, las cuales se pueden encontrar en peligro de extinción. Es por esta razón que principalmente se consideran de gran importancia. Por otra parte, estas suelen suponer un acervo biológico de gran importancia, tanto desde la perspectiva científica como la cultural.
Historia de la reserva natural
Sri Lanka fue el primer país del mundo en tener un santuario natural, fue el rey Devanampiya Tissa of Anuradhapura quien ordenó la protección de la vida silvestre de los alrededores del pueblo de Mihintale durante el siglo III a.C. Aunque desde la antigüedad remota ya existía la práctica cultural para el mantenimiento de las áreas reservadas para la vida de los animales. En algunas ocasiones la protección de estas áreas generalmente se debía por motivos religiosos, pues por lo general eran bosques o zonas “malditas”, a las cuales no se debía acceder como forma de protegerse de los espíritus y demonios que ahí habitaban. Hoy en día se pueden conseguir algunos lugares que están resguardados por estos mismos motivos.
Por otra parte, la primera reserva natural moderna fue la montaña de Drachenfels, en Prusia, la cual fue creada en 1836 con el objetivo de acabar con las actividades mineras de la región. Luego en 1872 se creó en Estados Unidos el parque Yellowstone.
Posteriormente se crearon en 1903 el Parque Nacional Real de Sídney y el Parque Nahuel Huapi de Argentina. Por otra parte, el zapovédnik fue la primera reserva creada con fines científicos, por parte de la Unión Soviética en 1920.
Tipos de reserva natural
Hoy en día son reconocidas dos tipos de reservas naturales:
- Las reservas naturales integrales: Estas son aquellas en las que están prohibidas cualquier actividad de explotación de recursos o actividad económica, a excepción de aquellas que cuenten con una autorización para fines científicos o de investigación.
- Las reservas naturales parciales: Son aquellas en las cuales la explotación de algunos recursos está permitida, siempre y cuando se establezca un acuerdo con las normas de conservación ecológica imperantes.
Por otra parte, no se deben confundir los Parques nacionales con las reservas naturales, pues si bien pueden parecer similares, estas no son lo mismo. Los Parques naturales suelen contar con extensiones salvajes que son preservadas más o menos en su estado original. Estos además tienen un propósito recreativo, así como la preservación del legado biológico de la zona y la purificación del aire.
En cambio los terrenos de las reservas naturales suelen ser más pequeños en comparación, además de que están creadas con el objetivo de preservar la biodiversidad de la región. En otras palabras, las leyes y las fronteras marcan la diferencia pues son más respetadas y estrictas.
Funciones de la reserva natural
Además de fomentar el desarrollo humano sostenible, las reservas naturales cuentan con otras funciones, tales como:
- Aportar un espacio natural para el aprendizaje de las ciencias biológicas o la investigación, evitando interferir en el ecosistema de la zona.
- Fomentar el desarrollo humano sostenible, al mismo tiempo de la perpetuación de la naturaleza.
- Proteger a las especies que se encuentren amenazadas y así poder evitar su extinción.
- Preservar la diversidad genérica natural, además de los paisajes y los ecosistemas autóctonos de la zona.
La caza irresponsable de especies, así como la tala de árboles y la extracción de minerales y elementos del suelo, suelen ser más importantes para algunas personas que los daños ocasionados al ecosistema a largo plazo. Es por esta razón que existen en la actualidad algunos organismos internacionales que luchan contra el comercio y el tráfico ilegal, al mismo tiempo que hacen entrar en conciencia a la población sobre las consecuencias de estas actividades ilícitas.
Es por esta razón que las reservas naturales son fundamentales para combatir la preservación del planeta. El objetivo de estas es preservar la biodiversidad, en especial la de aquellas especies que se encuentran en peligro de extinción.