Debido a la pandemia del Coronavirus, la comunicación con nuestros amigos, conocidos y familiares se incrementó. Debido a que no podían realizarse visitas bajo ningún motivo por la cuarenta, las herramientas tecnológicas fueron de gran ayuda para poder oír, visualizar y contactar. De hecho, las videollamadas se consolidan entre los europeos como forma de socializar.
6Estudios sobre la ansiedad en la era digital
Estudios han señalado que la ansiedad que se produce al no poder “desconectar”, está ocasionando en las personas diversos problemas emocionales, agregando también el cansancio cerebral que se sufre por estar delante de una pantalla de un móvil o computadora por tanto tiempo.
El cansancio cerebral que se produce, se puede identificar fácilmente, es cuando se manifiestan síntomas como dolores de cabeza agudos, irritabilidad e insomnio acompañado de un tic que se produce en el ojo.
La profesora de la Universidad de Northern Illinois, Suzzanne Degges-White, creó un nuevo concepto para agrupar la ansiedad y el cansancio que es provocado por las videollamadas. Este nuevo concepto lleva el nombre de “Zoom anxiety”.
Suzzanne también ha indicado que otro problema que ocasionan las reuniones virtuales es que al solo visualizar el rostro de la persona y no su cuerpo completo, no podemos reconocer su leguaje corporal, lo que ocasiona que solo se reciba el 80 % del mensaje que queremos transmitir o recibir.
Esta falta de lenguaje corporal, dificulta el poder conversar tratando de traducir gestos, perdiendo así una gran profundidad de lo que nos dicen o de lo que queremos transmitir nosotros a la otra persona.
El realizar de manera excesiva videollamadas, causa que las personas a menudo sientan angustia y nervios por su imagen, estas herramientas tecnológicas tienen la función de poder observarnos nosotros mismo durante una videollamada, lo que impide poder concentrarnos en la conversación, y estarlo más de cómo nos vemos en pantalla.