El especialista en Aparato Digestivo y Medicina Interna Carlos Suárez ha advertido de que «muchos pacientes desconocen que el 95 por ciento de los casos de cáncer colorrectal tiene su origen en un pólipo presente en el colon, y que podría identificarse y extirparse en una colonoscopia».
Tal y como explica, los pólipos son pequeños crecimientos en la pared mucosa del colon que en un principio pueden medir unos pocos milímetros, pero con el paso de los años, según van creciendo, pueden convertirse en lesiones precancerosas y que, si no son eliminados a tiempo, son el origen de un cáncer de colorrectal. Estos pueden ser planos o prominentes (con un tallo unido a la pared del colon que les da una apariencia de champiñón).
Para el doctor, el principal problema es que no presentan síntomas hasta que adquieren un tamaño grande que puede provocarles erosiones de forma que se puede producir un sangrado en heces o anemia provocada por una pérdida de sangre pequeña pero continua.
«La forma más eficaz de detectar estos pólipos es mediante una colonoscopia, una prueba totalmente segura e indolora para los pacientes al ser realizada mediante sedación, no solo los identifica, sino que lo puede extirpar en el mismo acto; de esta forma, el riesgo de cáncer de colon originados en un pólipo desaparece», afirma el doctor Suárez. Asimismo, la colonoscopia virtual también permite detectar estos pequeños pólipos, pero para eliminarlos el paciente tiene que ser sometido a una colonoscopia tradicional.
CUÁNDO SOMETERSE A UNA COLONOSCOPIA
Así, el experto recomienda someterse a una colonoscopia a personas mayores de 50 años, ya que el cáncer de colon afecta principalmente a esta franja de edad, aunque también puede desarrollarse en personas jóvenes. La edad aumenta las posibilidades de desarrollar pólipos en el intestino grueso, por lo que la pauta más recomendable es hacer una colonoscopia cada 4 años.
Por otro lado, las personas con antecedentes familiares también deberían realizarse esta prueba. «Si un familiar cercano ha padecido esta enfermedad, aumentan las posibilidades de desarrollar un cáncer de colon; en este caso, está indicada su realización a partir de los 40 años, con una periodicidad de 4 años», indica el especialista.
En este sentido, la colonoscopia también es recomendable para aquellos que tengan antecedentes de pólipos. La presencia de pólipos en el colon puede indicar una predisposición a que aparezcan nuevos y, en estos casos, la colonoscopia está indicada de forma anual, y la periodicidad irá aumentando según vayan apareciendo resultados negativos.
Por último, las personas con enfermedades inflamatorias intestinales crónicas como pueden ser la Enfermedad de Crohn o la colitis ulcerosa también deberían realizarse una colonoscopia a partir de los 40 años con una periodicidad de 4 años.
CÁNCER COLORRECTAL Y COVID19
Sobre cómo ha afectado el contexto de Covid-19 al cáncer colorrectal, sobre todo en 2020, el doctor indica que, cuando se produjo el diagnóstico, el estadio en el que se encontraba era más alto que en cualquier otro año, al tener miedo los pacientes a acudir a centros médicos para hacerse sus revisiones.
En este sentido, el confinamiento provocado por la pandemia del Covid-19 y el miedo que presentan todavía muchos pacientes, especialmente mayores, a salir a la calle para evitar el contagio, ha supuesto un empeoramiento en los hábitos de vida de la población.
«Ha aumentado el sedentarismo y con ello el peso de los pacientes, habiendo ya diferentes estudios que han demostrado que sobrepeso y obesidad agravan los síntomas de personas infectadas por coronavirus», explica el doctor Suárez.
Por otra parte, se ha incrementado el consumo de alimentos ultraprocesados y ricos en grasas «por ser más perecederos y calmar más la «ansiedad» provocada por la pandemia». Lo mismo ocurre con el hábito tabáquico y alcohólico, factores de riesgo de padecer determinados tipos de cánceres, entre ellos los digestivos como el colorrectal, avisa este especialista.