La campaña de la Declaración de la Renta 2020 comienza este próximo 7 de abril y los trabajadores que han estado afectados este año por un ERTE temen, y con bastante razón, el momento de enfrentarse a sus obligaciones tributarias.
Tener más de un pagador -por recibir una parte del SEPE-, los posibles errores cometidos por la Administración en el abono de tus prestaciones o el tipo de retención a aplicar son algunos de los principales temores de aquellos empleados que entraran en ERTE en algún momento de 2020.
1CÓMO AFECTA EL ERTE AL TEMA DE LOS PAGADORES
Los trabajadores que se vieran en ERTE durante el año pasado y que han cobrado una prestación del SEPE pasarán directamente a tener dos pagadores -la empresa donde estuviera dado de alta y el propio Estado-. ¿Qué significa esto? Que desciende considerablemente el umbral mínimo de ingresos para que sea obligatorio presentar la Declaración de la Renta.
Con un solo pagador no es necesario presentar la Declaración de la Renta si los ingresos no superan los 22.000 euros, pero si el contribuyente posee más de un pagador tendrá que hacerlo si ha percibido más de 14.000 euros durante ese año fiscal. Aunque la tributación sea la misma y en ese sentido no haya agravio con este tipo de trabajadores, la obligación de cumplimentar la declaración en hogares con ingresos de entre 14.000 y 22.000 euros puede afectar muy negativamente a la economía de según qué familias.