El Banco de España no descarta otra caída del PIB en el trimestre

El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, no descarta una nueva caída del PIB en el primer trimestre del año, como consecuencia de las medidas de restricción a la movilidad que se han aplicado en dicho periodo, al tiempo que ha sostenido que el volumen de fondos públicos comprometido por el Gobierno «debe ser flexible» y adaptarse a la evolución de la pandemia.

Así lo ha puesto de manifiesto durante la inauguración del ‘I Simposio del Observatorio de las Finanzas’ organizado por Invertia (El Español), en el que se ha mostrado partidario de mantener las medidas excepcionales de apoyo a la economía «hasta que la recuperación sea firme».

«Este apoyo es también crucial para evitar que a la crisis se le añada un componente financiero, que la haría más profunda y duradera», ha advertido.

Según ha apuntado Hernández de Cos, el contexto macroeconómico actual se caracteriza por una recuperación «incompleta, gradual e incierta».

«De hecho, como resultado de las medidas de restricción a la movilidad que ha sido necesario aplicar durante el primer trimestre, no es descartable una nueva caída del PIB en este período, lo que llevaría a que, a finales de marzo, su nivel se encontrara todavía algo más de 9 puntos por debajo del observado antes de la crisis», ha advertido.

De Cos ha advertido de la necesidad de que los bancos mantengan un enfoque «prudente», dado que el impacto de la pandemia no se ha manifestado plenamente en sus balances debido a las diversas medidas de respaldo público y a que los deterioros crediticios se producen con retraso temporal.

De hecho, ha apuntado que las proyecciones de los ejercicios de resistencia y las medidas implícitas de la calidad de crédito en las valoraciones observadas en los mercados financieros «sugieren un aumento de la morosidad en el horizonte próximo». «Aparecen también ciertas señales de anticipación de deterioros, como el aumento de créditos refinanciados no dudosos y en vigilancia especial, y un comportamiento diferencialmente peor en segmentos como el consumo«, ha reconocido.

Por consiguiente, el gobernador ha instado a las entidades financieras a mantener la política de anticipación del reconocimiento de deterioros, que si se realiza de manera adecuada y a tiempo permitirá obtener un diagnóstico fiable de la situación que impida que se produzcan dislocaciones en la asignación de recursos financieros a las actividades productivas y se favorezca la adopción de las medidas necesarias para que la recuperación sea robusta y sostenida.

«El mantenimiento de este nivel de esfuerzo en los próximos trimestres permitiría cubrir las necesidades de provisionar que anticipan las pruebas de resistencia», ha señalado.

LOS FONDOS PÚBLICOS DEBEN SER FLEXIBLES

El gobernador del Banco de España ha apuntado que las empresas no financieras y las familias han visto deteriorada su solvencia por la crisis, un problema que, de materializarse, supondría una destrucción de tejido productivo y de empleo, lo que acabaría afectando a la posición patrimonial del sector bancario, que a su vez podría responder con «una restricción crediticia que realimentara los efectos negativos sobre la capacidad de recuperación y el crecimiento económico a medio plazo».

En este contexto, Hernández de Cos ha valorado que el nuevo paquete de ayudas a empresas y autónomos aprobado este mes por el Gobierno «puede resultar una herramienta útil» para reducir el riesgo de que la pandemia provoque el cierre de empresas y negocios viables que están atravesando una situación de dificultad especial, si bien ha alertado de que una ejecución rápida y homogénea es «particularmente relevante».

Asimismo, ha señalado que los mecanismos de reparto deben permitir focalizar selectivamente las ayudas en las empresas viables pero con problemas de solvencia y que el volumen de fondos comprometidos «debe ser flexible», adaptándose a la propia evolución de la pandemia y a la eventual materialización de los riesgos.

En el caso de las empresas no viables, el gobernador del Banco de España ve necesario una agilización de los procesos de liquidación para «evitar que se consuman en ese proceso recursos que podrían ser más beneficiosos en otras actividades».

FUSIONES TRANSFRONTERIZAS, PARTICULARMENTE POSITIVAS

Durante su intervención, De Cos ha recordado que el sector bancario se enfrenta a nuevos riesgos tecnológicos, como los asociados a los ciberataques o a la dependencia de los proveedores de servicios externos, y ha reconocido que las bigtech ejercen una presión adicional sobre la rentabilidad de la banca, ya debilitada.

Según ha advertido, esta baja rentabilidad requiere que las entidades «sigan profundizando en las ganancias de eficiencia, reduciendo costes y utilizando más intensivamente las nuevas tecnologías».

En concreto, el gobernador ha indicado que la mejora de la eficiencia de las entidades debe alcanzarse perfeccionando el uso de la información con la que cuentan, para lo que se necesitan importantes inversiones en digitalización, así como la incorporación de nuevas tecnologías en el tratamiento de la información que permitan cambiar el modelo de negocio controlando el perfil de riesgos.

Respecto a los procesos de consolidación del sector, Hernández de Cos ha reiterado que «pueden ser un instrumento útil adicional» para lograr dicha mejora de la eficiencia, si bien es necesaria una evaluación individual de cada propuesta de fusión.

«Las operaciones transnacionales uropeas serían particularmente positivas, dado que permitirían profundizar en la Unión Bancaria, minorar el nexo de riesgo bancario-soberano e incorporar mayores posibilidades de diversificación», ha destacado.

RESPUESTA EUROPEA A LA CRISIS

Hernández de Cos ha insistido en la necesidad de perseverar en una respuesta europea a la crisis, también en el ámbito financiero. Así, culminar con la Unión Bancaria mediante la aprobación de un fondo de garantía de depósitos europeo plenamente mutualizado supondría «una contribución decisiva» para garantizar la estabilidad financiera en el área del euro, tanto en los próximos meses como en un horizonte de medio plazo, ha asegurado.

Igualmente crucial sería, en su opinión, la profundización en el proyecto de Unión del Mercado de Capitales y la adecuación de la normativa de resolución y liquidación europea a una hipotética crisis sistémica o el posible papel de las compañías de gestión de activos para situaciones de grave deterioro de los balances de las instituciones financieras europeas.

Según ha resaltado De Cos, los Estados miembros de la UE deberían avanzar rápidamente para alcanzar un acuerdo que permita crear un procedimiento común europeo para la liquidación administrativa de las entidades de crédito. «En España, la experiencia reciente demuestra la poca eficiencia del actual procedimiento concursal para entidades de crédito en términos de plazos y de valor recuperado», ha reconocido.