Dicen que los ojos son el espejo del alma, pero las manos también deberían serlo, porque reflejan mucho más de lo que pensamos de nuestra personalidad, de nuestro pasado y de nuestro presente. Algunos también dirán que del futuro. No sabemos si todo eso será cierto, pero por si acaso, nosotros te lo vamos a contar.
[nextpage title=»No hay dos manos iguales»]