Las firmas de servicios profesionales KPMG y PwC percibieron 74,17 millones de euros en honorarios por auditar las cuentas y realizar otros trabajos relacionados a las seis principales entidades financieras españolas durante el ejercicio 2020.
KPMG se embolsó por estos trabajos, que realizó a BBVA, Banco Sabadell y Bankia, unos 33,89 millones de euros de forma agregada; mientras que PwC, que mantuvo contratos con Banco Santander, CaixaBank y Bankinter, percibió 40,28 millones de euros, según consta en los informes financieros de los distintos bancos consultados.
Por entidades, Bankinter pagó honorarios a PwC de 790.000 por los servicios de auditoría de cuentas en 2020, aunque ascienden a 919.000 euros si se tienen en cuenta los de verificación.
Éstos últimos incluyen la emisión de la ‘comfort letter’ en relación con la emisión de renta fija y el informe de auditor referido a la Información relativa al Sistema de Control Interno sobre la Información Financiera (SCIIF).
También se refieren al Informe Anual de Protección de Activos de Clientes de varias sociedades del grupo Bankinter y otros informes de procedimientos acordados requeridos por el Banco de España.
BBVA abonó a KPMG unos honorarios por las auditorías realizadas a sus sociedades de 29 millones de euros. Del total, 23,6 millones de euros correspondieron a las auditorías legales de cuentas, 1,3 millones de euros a informes requeridos por supervisores o por la normativa legal y fiscal de los países en los que el grupo opera, y el resto a ‘otros trabajos relacionados’.
De su lado, CaixaBank pagó a PwC 5,86 millones de euros, de los que 4,74 millones de euros se refieren a la auditoría de cuentas. El importe de la auditoría de cuentas se divide, a su vez, en 3,58 millones de euros en auditoría, 671.000 euros en trabajos de revisión limitada y 493.000 euros en ‘otros servicios de auditoría’.
Los 1,12 millones de euros restantes los percibió PwC de CaixaBank por la realización de ‘comfort letters’ para emisiones y de informes de procedimientos acordados.
Por su parte, Banco Sabadell pagó a KPMG en el ejercicio 2020 por los servicios de auditoría de cuentas y por otros servicios relacionados con la auditoría en España un total de 2,29 millones de euros.
Cabe señalar que la entidad presidida por Josep Oliu también abonó unos honorarios de 25.000 euros por los servicios prestados por KPMG para las auditorías correspondientes a sucursales en el extranjero, como su filial británica TSB.
Igualmente, Bankia pagó 2,6 millones de euros a KPMG por estos trabajos, de los que 2,2 millones de euros corresponden a los servicios de auditoría, 65.000 euros a servicios de verificación y 11.000 euros a ‘otros servicios’. Adicionalmente, el banco percibió unos honorarios de 225.000 euros en 2020 por los servicios de auditoría a sociedades dependientes.
Finalmente, Banco Santander se anotó como gastos para estos trabajos, realizados por PwC, unos 33,5 millones de euros correspondientes a los honorarios de sus cuentas anuales individuales y consolidadas y de las sociedades dependientes del grupo, así como la emisión de ‘comfort letters’ u otras revisiones requeridas.
No obstante, el importe de los servicios prestados por el auditor a la entidad presidida por Ana Botín asciende a 95,8 millones de euros si se tienen en cuenta también trabajos como la auditoría integrada preparada a efectos del registro del informe anual en el Formato 20-F para el supervisor de Estados Unidos, la auditoría de control interno (SOx), o los informes regulatorios obligatorios correspondientes a las distintas localizaciones del grupo, entre otros.
Estos importes anotados por cada una de las seis entidades en sus informes financieros se refieren principalmente a los servicios prestados por KPMG y PwC para la realización de las auditorías de cuentas y trabajos relacionados con las mismas.
Si se incluyen otros servicios como los relacionados con el asesoramiento fiscal o revisión de expertos independientes en materia de prevención y blanqueo de capitales, entre otros, las cantidades percibidas en honorarios por las firmas de servicios son mayores.