Los líderes sindicales de CCOO y UGT, Unai Sordo y Pepe Álvarez, ha protagonizado este jueves una nueva concentración, en este caso frente a las puertas de la Delegación del Gobierno de Castilla-La Mancha en Toledo, para reclamar el Ejecutivo de Pedro Sánchez «retomar la agenda reformista» para acabar con la reforma de las pensiones de 2013 o la reforma laboral, así como reivindicar la negociación para volver a subir el Salario Mínimo Interprofesional (SMI), peticiones que, tal y como han defendido, seguirán motivando movilizaciones en el futuro.
Estas reivindicaciones, tal y como ha asegurado Sordo, se mantendrán al margen del «histerismo político» surgido este miércoles con las mociones de censura en Murcia y Madrid y la convocatoria de elecciones por parte de Isabel Díaz Ayuso.
«Los problemas de la sociedad no son que el PP quiera comerse a Cs, los problemas son la falta de empleo y la incertidumbre ante la salida de la crisis», ha dicho.
Pepe Álvarez compartía esta reflexión con Unai Sordo, defendiendo que las movilizaciones se mantendrán en el tiempo pese a la «bomba política que se lo está comiendo todo».
«Un sistema parlamentario no presidencialista permite no tener que convocar elecciones mientras haya vías alternativas», ha dicho, asegurando que es «poco democrática» la afirmación realizada por la presidenta en funciones de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, al sugerir la dicotomía de «socialismo o libertad». «El socialismo es compatible con la libertad. Esto nos lleva a una visión democrática muy corta», ha lamentado.
«HAY QUE RECUPERAR LA AGENDA»
Unai Sordo incidía en la necesidad de que el Gobierno de España «recupere la agenda social para una normalidad» que llegará a España en el corto plazo, advirtiendo de que aunque la recuperación «será intensa» tras el verano, hay que trabajar por que esta sea equitativa.
En este punto, ha recordado que en 2021 «siguen vigentes todos los recortes y reformas del Partido Popular» cuando gobernaba Mariano Rajoy y que lograron «bajar salarios de forma inadmisible».
Ahora, asegura, España «tiene que tener prioridades» para conformar una salida de la crisis que no deje atrás a nadie. «O el Gobierno retoma la agenda o se hará corresponsable de las reformas del PP», ha advertido.
En este escenario, ha comprometido seguir trabajando «desde la calle y con firmeza» para defender sus reivindicaciones y conseguir «recuperar la agenda» ante el peligro de que «no se recuperen los salarios perdidos durante la crisis».
Ante la expectativa de que la recuperación «no sea vigorosa» se hace necesario «repartir la riqueza cambiando las reformas de la pobreza», una petición que se hace «por justicia social».
«Ya hemos sido comprensivos durante pandemia porque tocaba hacerlo frente. Hemos sido corresponsables de acuerdos que han evitado la destrucción de empleos. Pero ahora toca recuperar la agenda», ha insistido el dirigente sindical.
PEPE ÁLVAREZ: «LAS MOVILIZACIONES HAN VENIDO PARA QUEDARSE»
De su lado, el máximo dirigente de UGT ha advertido de que estas movilizaciones periódicas que empezaron el pasado mes en Madrid «han venido para quedarse y van a continuar», algo de lo que el Gobierno «tiene que ser consciente», ya que «no tiene otra alternativa» que «cumplir sus compromisos electorales y avanzar en el programa reformista».
«Es especialmente importante que la ciudadanía sea consciente de que nunca se nos ha regalado nada y sólo será posible cumplir ese programa y quitar losas a los trabajadores si combinamos movilización y negociación», ha aseverado.
Por ello, «más allá de coyunturas políticas», ahora los sindicatos van a «continuar firmes para conseguir sus objetivos» y derogar la reforma laboral, aunque sea al margen de «una mesa de diálogo con la patronal».
Incluso, abre la puerta a que esa reforma «sea parcial en el tiempo», pero en el camino de «acabar con la miseria».
Del mismo modo, ha incidido en la necesidad de «devolver la plenitud a la negociación colectiva», algo que no se va a conseguir y «no siguen las movilizaciones».
Conseguir un sistema de pensiones «suficiente» y no recortarlas; y afrontar el horizonte de 1.200 euros de Salario Mínimo Interprofesional en 2023 son objetivos «irrenunciables», según Álvarez. «Si te movilizas, consigues cosas», ha zanjado.