La crema de limón es uno de los postres más reconocidos a nivel mundial. Las razones son simples, y es que el limón con textura a natilla es simplemente la gloria a nivel de repostería internacional.
La crema de limón o ‘lemon curd’, es considerada como una de las grandes recetas de la repostería inglesa y que aunque parece una simple natilla, es la gloria en cada bocado.
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La crema de limón aunque es característica de la repostería inglesa, es un postre que ha escalado en las cocinas internacionales. Crema o natilla, cualquiera que sea el nombre, figura en las diferentes cartas de los grandes restaurantes.
No es un postre tan dulce pero tampoco tan ácido, cremoso y funciona bien para después de cualquier comida fuerte. En el Reino Unido suele tomarse para acompañar el té o con pan, algunos incluso la toman con algunas galletas.
Muchos toma la crema de limón para untar en el pan o las galletas tal como si se tratara de una mermelada pero con la contextura más suave. Otras opciones es usar la crema de limón como un relleno para tarta o para rellenar alguna masa de hojaldre, milhojas y otros.
Sin importar cual sea la opción predilecta, la crema de limón es un postre delicioso, suave y sencillo de realizar. Lo único que debemos es atender en la cremosidad, pero si se realiza el procedimiento adecuado, obtendremos la mejor.
¿Cómo preparar una perfecta crema de limón en menos de 5 minutos?
La reconocida crema de limón, favorita en el mundo entero, se prepara a base de zumo de limón, azúcar, huevo y mantequilla.
Esta preparación mega cremosa se logra gracias a la mantequilla espesa, gracias al huevo y con el sabor característico entre dulce y ácido debido al zumo de limón con azúcar. Es una bomba de sabores al paladar que atrapa a quien sea.
Sobre su historia, se sabe muy poco, es decir no hay mucha información sobre la persona a quien se le ocurrió un día inventar una crema deliciosa. Solo hay datos que se trata de una receta que data desde inicio del siglo XIX. Esto debido a que la receta aparece en los libros culinarios de ese entonces.
De acuerdo a las recetas tradicionales de ese entonces, la crema de limón se utiliza (al igual que en la actualidad) pero en Reino Unido, como acompañamiento. Es decir que es el acompañante de los conocidos muffins ingleses, que son unos panes típicos que se comen a la hora del té.
La crema de limón tal como ya lo mencionamos, puede ser el relleno de pasteles y hasta parte del conocido lemon pie, lemon bars o las magdalenas. La verdad es que es una crema versátil.
Sobre su conversación, la crema de limón anteriormente debía pasar por un largo proceso ya que conservarla era un tema delicado. En la actualidad basta y sobra con refrigerar para que se pueda disfrutar en cualquier momento y en cualquier día después de su preparación.
En cuanto a sabor, incide la calidad de los limones utilizados y la paciencia que se tenga para darle textura a la crema. Recuerda que es una crema que no debe quedar tan floja, o sea debe tener firmeza para poder degustar como se debe. En cuando a la textura para usarla de relleno, debes enfocarte en prepararla de acuerdo a lo que necesitas.
Pues quizá puedas quererla un poco más suave para untar o más firme para usarla en rellenos, así que eso dependerá de ti y de la función de la preparación.
Paso a paso para hacer un ‘lemon curd’
Ahora ya que tenemos varios puntos en cuenta, es tiempo de pasar al paso a paso para prepararlo.
Ingredientes
- 200 mililitros de zumo de limón (3 limones grandes o seis medianos).
- La ralladura de un limón grande.
- 4 huevos.
- Azúcar (110 gramos).
- Mantequilla (60 gramos).
- Un poco de sal.
Preparación
Lo primero que debes hacer es rallar la cáscara del limón por la parte más fina del rallador. Evita rallar la parte blanca porque amarga la mezcla. Ahora, exprime el zumo de los limones y reserva.
Acto seguido, pon a calentar un olla con agua. Ten en cuenta que debes utilizar un recipiente que soporte el calor.
Ahí, deberás añadir 3 huevos, la yema del cuarto y el azúcar. Ve batiendo a mano poco a poco para que la mezcla sea homogénea.
Ahora, es el momento de incorporar un poco de sal y el zumo de limón. Mezcla de nuevo y pon el recipiente dentro de la olla con agua para terminar la preparación al baño María.
Es recomendable que la mezcla se mueva con una cuchara de madera durante unos cinco minutos hasta que empiece a espesar.
Luego, retira el recipiente del baño María y añade la mantequilla y la ralladura de limón. Sigue mezclando muy bien hasta lograr una crema sin grumos. Recuerda que de ti depende cuan cremosa quede.
Deja enfriar antes de degustarla o de usarla de la forma que prefieras.
