El próximo mes de agosto, la princesa Leonor se verá obligada a seguir los pasos de su padre, el rey Felipe VI y marcharse a estudiar en el extranjero, concretamente en un internado de Gales, situado en un castillo del siglo XII. En el comunicado emitido por la Casa Real decían que la princesa Leonor será educada en unos valores que se basan en la diversidad, la paz, el pensamiento crítico y las relaciones internacionales.
Para ser admitida en el internado, la princesa tuvo que pasar un exhaustivo proceso de selección que la llevará a compartir centro de estudios con personas de más de 90 nacionalidades distintas.
5Una experiencia que ayudó a Felipe VI a valerse por sí mismo
Pero sus aficiones iban más allá, también participó en obras de teatro en el colegio no solo como actor sino también como tramoyista que ayudaba a sus compañeros.
Según Sabino Fernández Campo que fuera jefe durante muchos años de la Casa Real aquellos años sirvieron al joven príncipe para «aprender a buscarse nuevas amistades en un lugar lejano, en el que se habla otro idioma y eres al menos conocido que en su país, donde podía estar rodeado de atenciones y, a veces hasta de aduladores no siempre convenientes». Y es que el príncipe Felipe allí era simplemente uno más de los 255 alumnos que se alojaban en el centro conocido por todos como Flip.
