Otro derbi madrileño se viene en LaLiga Santander y en esta ocasión tanto el Atlético de Madrid como el Real Madrid buscarán una victoria que los refuerce en un campeonato que anhelan con ansias. La lucha en la cima del torneo español está que arde y con la victoria del FC Barcelona ante el Osasuna, pues los blaugranas se pusieron a solo dos puntos de los rojiblancos (58 puntos a 56 puntos), aunque con dos partidos más, y se distanciaron de los merengues por tres puntos (53 puntos). El partido definitivamente definirá el futuro del campeonato y por eso es por lo que batallarán.
Cierto es que ahora los ánimos están muy cambiados a como se presumía hace unas semanas. La victoria del Atlético sobre el Villarreal (0-2) le dio fuerza a un equipo que venía un poco caído y reforzó ese sentimiento de que lo pueden lograr: obtener el título de Liga. Del lado de los de Zidane, el empate ante la Real Sociedad los bajó un poco de la nube y los dejó en una posición complicada en la que otro error los dejaría sin posibilidades de vencer. La pelea por la supremacía de la ciudad se define en este nuevo derbi madrileño que dejará todo servido para el vencedor.
3Una estrategia que funcione
Antes las estrategias de ambos equipos era muy clara. El Atlético se basaba en una defensa tenaz y esperar la mejor ocasión para contragolpear y tomar desubicado al rival; del lado del Madrid todo estaba centrado en un ataque feroz que al final siempre acababa dando resultado, ya fuera por insistencia o por pegada. Ahora ambos conjuntos estaban cambiando sus modos de juego y ahora tratarán de contrarrestarse con nuevas fórmulas que tienen preparadas Zidane y Simeone.
Con Simeone las cosas han cambiado de plano, de ahora en adelante ha comenzado a usar tres centrales con dos carrileros largos; junto a eso, la llegada de Luis Suárez le ha dado el arma definitiva para hacer los goles que antes fallaban y junto a él tanto Llorente como Joao Félix mejoraron mucho y ahora son letales. Ante eso los blancos, buscarán imponerse en el derbi madrileño con una defensa bien armada y esos movimientos rápidos en ataque para abrir más espacios. La pizarra será clave y todo dependerá de una buena estrategia.