- Esta primavera, el icónico hotel de la costa marbellí concebido por el Príncipe Alfonso von Hohenlohe, renueva y amplía su oferta culinaria con el lanzamiento del Clubhouse.
- El Clubhouse es un espacio atemporal pensado para disfrutar durante todo el día.
Esta primavera, Marbella Club Hotel • Golf Resort & Spa, escribe un capítulo más en su historia, con el lanzamiento del Clubhouse: el nuevo punto de encuentro de los locales y huéspedes que abarca una serie de espacios con un constante movimiento, atemporal y multigeneracional, que han sido diseñados para beber, comer, arreglarse, mimarse, ir de compras y disfrutar de buenos momentos.
Inspirándose en los orígenes del hotel durante los años cincuenta, cuando el hotel era el lugar de reunión del Príncipe Alfonso von Hohenlohe y sus flamantes amigos como Brigitte Bardot y Cary Grant entre otros, esta reinvención del Clubhouse original del hotel defiende las mejores cosas en la vida: la comida y bebida, la diversión, la naturaleza, la amistad y la familia. Todo ello sin ningún tipo de pretensiones al tiempo que fomenta los sentimientos de pertenencia, conexión y comunidad.
Cuatro espacios clave
Los huéspedes pueden disfrutar de las cuatro estancias clave: el restaurante El Patio, el corazón palpitante del hotel que estará capitaneado por el recién nombrado chef ejecutivo del Marbella Club, Sergio Arconada; Rudi’s, un sentido homenaje al Conde Rudi von Schönburg, el primer director general del hotel, quien, a sus 88 años, sigue en activo; La Bodega, elegante escenario para catas de vino con el reconocido sumiller, Ángel González y donde se podrán disfrutar también cenas personalizadas y privadas; y un acogedor patio central con una peluquería, floristería y espacios versátiles para colaboraciones pop-up.
El hotel siempre se ha inspirado en el estilo de vida de Andalucía y con este objetivo y para dotar al hotel de un ambiente tranquilo y relajado, propio de un pueblo andaluz, predominan los espacios abiertos y conectados entre sí. Las interioristas Marie-Caroline Willms y Johanna Haniel, del estudio de diseño español EMCI Interiors, han trabajado para conseguir la sensación de un movimiento fluido entre estancias. En todas ellas priman los materiales naturales que se utilizaron en el diseño del hotel en sus orígenes (bambú, teca, cerámica pintada a mano y terracota) e interiores que se sienten exteriores gracias a los detalles botánicos, como en el papel pintado de la casa Schumacher.
Una mirada cercana al Clubhouse
Marbella Club nació de la sencillez y la afabilidad, y el Clubhouse nace manteniendo ese espíritu. Un lugar pensado para disfrutar o trabajar, para el día o para la noche, para los jóvenes y más adultos. Una flota de talentosos creadores: desde artistas, artesanos y diseñadores hasta mixólogos y chefs, toman las riendas, combinando con sensibilidad la innovación con las raíces atemporales y «perfectamente imperfectas» del hotel.
El nuevo restaurante de Marbella Club, el cual estará abierto durante todo el día, anima a los huéspedes a reunirse para charlar, disfrutar de zumos matutinos, tapas, un almuerzo o una cena relajada en cualquiera de estos espacios: en la pérgola, bajo las vides, o en familia en la gran mesa de madera. Un lugar que cautivará por un ambiente elegante y sofisticado a la vez que vibrante en el que se respira la esencia de Andalucía.
Una chimenea imponente
En el mismo lugar donde una vez estuvieron las 13 habitaciones originales del hotel, se encuentran dos espacios perfectamente complementarios y conectados que evocan un sentimiento mediterráneo único donde todo fluye de una manera natural: uno en tonos azules y verdes vibrantes con un atractivo diurno y animado; mientras que el otro se inspira en un glamour nocturno, con muchos detalles en un tono rojo rubí propios de los teatros.
Una imponente chimenea con esculturas de tritones elaborados de manera artesanal por el dúo sevillano, Exvotos y con motivos inspirados en los mitos de los océanos, así como alusiones a los jardines que se encontró el Príncipe Alfonso a su llegada a Marbella, presiden uno de los espacios que no dejará indiferente a nadie. Una barra circular inspirada en la Plaza de España sevillana, imágenes históricas del hotel, paredes forradas de rafia, helechos suspendidos de una cúpula…todos los detalles cuentan una historia.
Menú de impresión
El chef ejecutivo, Sergio Arconada, será el encargado de deleitar a sus comensales con un menú que se inspira en la Riviera mediterránea y las costas Bereberes. Una propuesta relajada de calidad basada en productos de temporada y locales y elaborada junto a la Chef turca Esra Muslu (ex Soho House Europa y Ottolenghi Londres).
Nelson Gallo, mixólogo del Clubhouse, añadirá su magia botánica a la oferta con cordiales hechos en casa y contando con su propio huerto de hierbas aromáticas y cítricos. El mixólogo Marc Álvarez (Hermanos Adrià y Grupo El Barri) añadirá también su know-how a través de propuestas para las cartas de temporada.
Rudi’s bar
Solo hay un conde Rudi von Schönburg y, por tanto, solo hay un Rudi’s bar; un elegante homenaje al primer director general del Marbella Club. Rudi’s es un acogedor y bohemio refugio de invierno, pensado para ser el escenario donde brindar con champán y acompañarlo de unas tapas, concursos de backgammon y cocteles por la noche junto a la chimenea amenizados por música en vivo.
Diseñado para evocar la sensación de una sala de estar familiar, el atractivo de Andalucía se materializa en obras de arte inspiradas en la Alhambra, taburetes con borlas como las que lucen los caballos jerezanos y un tablao flamenco para aquellas actuaciones improvisadas; en la sala también luce una espectacular chimenea con conchas incrustadas que hace un guiño al mar Mediterráneo e incluso encontramos un majestuoso tigre presidiendo el escenario.
400 referencias de vino en Clubhouse
Un homenaje en vivo a las más de 400 referencias que forman la carta, La Bodega recoge la historia de bodegas familiares locales, así como otras referencias más especiales. Una de las características de este espacio es su techo con efecto ondulado, los elegantes paneles de madera de cerezo y luces sutilmente ocultas. La Bodega se convierte así en el lugar perfecto para catas privadas, en los cuales Sommelier Ángel González utiliza una variedad de herramientas como tierras o cuernos biodinámicos para darle color a estos encuentros.
El acogedor comedor privado del Clubhouse es ideal para ocasiones especiales, catas de vino y eventos íntimos; se pueden degustar menús elaborados a medida y puesta de mesas originales para disfrutar de los momentos de ocio. Las paredes están tapizadas con un alegre lino bordado con caprichosas ilustraciones de templos mayas; los muebles de color verde azulado, turquesa y jade se suman a la sensación de espacio jovial.
Espacios clásicos del Clubhouse
El maestro parrillero de El Grill, Roque Juárez Junior, continúa el legado de su padre en el Marbella Club, ofreciendo recetas clásicas que se cocinan en la misma parrilla de bronce en la que trabajó Roque Juárez, su padre y predecesor. Abundan los platos de carne: suculentos cortes como el tomahawk y el chuletón, servidos con la famosa salsa Roque; al igual que los clásicos como el Soufflé de Queso Parmesano o pato a la miel, que se ha convertido en uno imprescindible de los asiduos a El Grill. Un ambiente tradicional, ceremonial y romántico.
Si sigue el aroma del jazmín y la flor de azahar llegará al discreto y afable Summer Bar, donde la melodía del piano y el murmullo del mar han puesto la banda sonora de noches inolvidables desde los años cincuenta. Los elegantes cojines con estampados de cítricos y bancos de obra invitan a descansar y desconectar durante horas.