Cepa británica, cepa brasileña y ahora llega la cepa californiana del Covid. Lo han llamado “el diablo” y no tiene cuernos ni rabo, ni viste de rojo, pero es más virulenta de lo que conocíamos. O al menos eso es lo que han dicho una parte de los expertos y científicos. Y es que en aquella región estadounidense de California se ha visto un gran aumento de la incidencia del coronavirus. Los médicos de Estados Unidos ya han advertido de que esta mutación es igual de peligrosa que las otras variantes conocidas del virus.
Sin embargo, la cepa divide a los científicos. Y es que hay otros expertos que han pedido cautela ante la falta de datos. Para poder hacer afirmaciones de este estilo y alertar a la población hay que tener en la mano ciertos estudios científicos. Y todavía no se ha estudiado a “el diablo”. Mientras llegan y no llegan los estudios, la variante del Covid es la más dominante en toda California. Tiene el nombre de B1427/B1429. Vamos a ver qué datos se conocen de esta nueva cepa del coronavirus llamado “el diablo” y por qué hay que tener cuidado con esta variante.
6Más agresivo y resistente
La mutación del Covid californiano “el diablo” afecta a la proteína que utiliza el virus para introducirse en las células y replicarse. Una de ellas permite al coronavirus el entrar mejor en las células. Y esto es una novedad en esta cepa.
Esta mutación hace que “el diablo” sea más virulento y pueda hacer más daño. Eso hace que, según experimentos, este virus pueda ser un 40% más infeccioso y atacar más fácilmente al tejido interno de los seres humanos.
También se ha demostrado en laboratorio que el virus es más resistente. Es decir, que los anticuerpos son menos efectivos a la hora de combatir a “el diablo”. De hecho, en experimentos han visto como la eficacia de los anticuerpos fue un 50% menor.
Y en cuanto a la virulencia del Covid californiano, en algunos pacientes, se ha visto que los contagiados por la variante tenían más probabilidades de ser pacientes graves. Y también 11 veces más probabilidades de morir. Así que cuidado que “el diablo” ya está aquí.