Es una creencia popular que el estrés engorda, pero habría que matizarla. Lo que realmente hace que ganes peso es todo aquello que te comes de más, sea o no por causa de este desorden. Y es que el estrés crónico afecta directamente a nuestro sueño y desequilibra nuestros niveles de azúcar, lo que provoca una acusada sensación de hambre que te lleva a comer descontroladamente y engordar.
El estrés es, junto al insomnio y la ansiedad, uno de los trastornos por los que más personas acuden a consulta. Y como las otras dos, no solo deja secuelas psicológicas, sino también efectos físicos indeseables. Uno de ellos es la ingesta descontrolada de alimentos y la consecuente ganancia de peso.
5QUÉ HACER PARA COMBATIR EL ESTRÉS
Si realmente ves que el estrés condiciona tu día a día, tienes que plantearte frenar su acción cuanto antes, pues como te hemos explicado puede afectar muy preocupantemente a tu organismo y afectar no solo a tu salud mental, sino a la física.
Aunque no te lo creas, elementos bastante cotidianos y que todos tenemos a mano pueden ayudarnos. Como ya explicamos en este artículo, los videojuegos pueden ser útiles, pero también hay otros trucos: tener una almohada pesada, usar objetos manuales anti estrés, encender velas y elementos aromáticos, etc.