El Método Montessori fue creado por María Montessori, que era una pedagoga italiana que vivió a medio camino entre los siglos XIX y XX. Ella impulsó este método que bautizó con el apellido. Con él, quería que los niños, en sus primeras etapas vitales, aprendieran a ser lo más autónomos posibles. Muchos animales en la naturaleza, tras sus pocas horas de vida, ya pueden valerse por sí mismos. Sin embargo, los humanos no.
Es hasta los 6 años cuando los niños están haciendo tareas manuales que les hacen coger unos conceptos imprescindibles para la vida. Cualquiera, si deja al pequeño en la playa o en el capo, verá como con un cubo lo llena de agua o de arena para transportarlo a otro. También pueden coger piedras para guardarlas. O incluso ver si un objeto entra por un agujero. Con todo esto van aprendiendo conceptos que utilizarán más tarde. Pero el método Montessori busca que sean realmente autónomos e independientes. Pero para eso, necesitan desarrollarse en un ambiente preparado para ello. No solo en la escuela, si no también en tu propia casa. Así que te vamos a aconsejar cómo debes tener su dormitorio para implementar correctamente este método. Lo vas a notar rápido.
5Espacios abiertos
Además de espacios sin barreras, la habitación del niño para seguir el método Montessori debe tener espacios abiertos. No hace falta que tengan grandes dimensiones. A día de hoy no mucha gente se puede permitir esto.
Pero sí que conviene que en el espacio que tengan, sea abierto. Es decir, que no haya muebles o elementos que impidan el paso. También viene bien la creación de zonas diferenciadas para que sepa dónde leer, dónde jugar o dónde hacer sus creaciones.
Con esto conseguiremos que cuando el niño utilice uno de sus juguetes o libros, sepa dónde debe ir. De hecho, el método Montessori lo que busca es que, tras haberlo utilizado, lo devuelva en donde corresponde.