La directora insular de Infancia y Familia en el Consell de Mallorca entre 2016 y 2019, Magdalena Gelabert, ha asegurado este jueves que «hay indicios de explotación sexual de menores en Mallorca desde 2011 o antes» y ha considerado que el hecho de que «se quisieran escuchar estos indicios y ponerse a trabajar es cuestión de voluntad política».
«Es muy fácil cerrar los ojos y decir que el problema no existe», ha señalado Gelabert durante su intervención en la Comisión Política sobre Explotación Sexual Infantil en el marco del Consejo Rector del Instituto Mallorquín de Asuntos Sociales (IMAS).
Según la exdirectora insular, fue en 2015 cuando «se empiezan a monitorizar las fugas» y «a darle importancia a este tema». «A partir de este momento se unifican criterios, maneras de abordar la situación y un control exhaustivo de fugas. Una fiscalización a la que los centros no estaban acostumbrados, y se notaba», ha apuntado.
Gelabert ha indicado que los casos de explotación sexual a menores tutelados «existían igual antes, pero no se había prestado atención» o «no se le había puesto el nombre de explotación sexual infantil». «Nos dimos cuenta que durante muchos años la administración no había liderado esta cuestión», ha dicho, a la vez que ha asegurado que «el IMAS no conocía las condiciones en las que estaban sus niños y adolescentes».
En este sentido, ha expuesto que sus objetivos en la Dirección fueron atajar las fugas, mejorar las condiciones laborales de los trabajadores de los centros y los servicios residenciales, actualizar el reglamento de centros y evaluar los procesos y procedimientos del servicio, entre otras cuestiones.
De acuerdo con Gelabert, durante el tiempo que estuvo al frente de la Dirección, se actualizó el reglamento de centros, se puso en marcha la concertación de los programas y se redujeron las fugas o salidas no autorizadas de los centros. «A nosotros no nos interesaba si teníamos muchos o pocos casos, sino generar espacios seguros para que los chicos y chicas pudieran hablar con sus educadores referentes», ha destacado.
Además, ha censurado el tratamiento de los medios de comunicación con esta cuestión, que ha calificado como «sustancialmente mejorable. «No está mal hablar pero creo que no se ha hablado correctamente», ha señalado. «Las administraciones anteriores deberían reflexionar. Su inacción, negligencias y falta de proactividad y previsión privó a muchos niños y niñas de ser atendidos adecuadamente», ha concluido.
EN 2015 LA DIRECCIÓN TUVO CONSTANCIA DE VARIOS CASOS
Durante la comisión de este jueves también ha intervenido la directora insular de Infancia y Familia entre 2015 y 2016, Beatriz Morales, quien ha relatado que, cuando llegó a la Dirección en julio de 2015, se encontró un despacho vacío, sin papeles ni documentación en el ordenador. «Se hizo el traspaso en forma de un pequeño dossier donde figuraban todas las áreas de intervención del IMAS», ha censurado.
La exdirectora insular ha asegurado que en 2015 ya tuvo constancia de un caso de explotación por medio de la directora de un centro. «Además de dejarnos blancos nos sorprendió», ha comentado. Así, ha explicado que, tras tener conocimiento, desde el área comenzaron a investigar y a preguntar a los técnicos, de forma que comenzaron a salir «casos aislados que podrían estar relacionados con este tipo de explotación.
«Se empiezan a hacer reuniones para ver qué esta pasando», ha apuntado. Asimismo, se puso un parte en Fiscalía, se aplicaron los protocolos para tratar esta cuestión y la directora insular se reunió con todos los servicios de menores de los ayuntamientos de Mallorca.
En este sentido, ha destacado que durante el tiempo que estuvo al frente de esta dirección tuvo constancia de un total de 15 casos sospechosos de explotación sexual infantil. De esta forma, ha considerado que esta es una problemática que «debía de estar sucediendo, pero no se puso sobre la mesa seriamente». «No creo que saliera así de repente», ha dicho.
Morales ha explicado que decidió presentar su dimisión en septiembre de 2016. «Me metí mucho en este tema emocionalmente», ha declarado, puesto que esta cuestión le impactó mucho. «Al final tu no puedes cargar con todo, es un tema muy estructural que depende de muchas instituciones», ha añadido.
Respecto a las posibles soluciones a este problema, ha insistido en que esto «no pasa esto solo con los niños que están en protección, es un problema estructural». «Necesitamos remar todos en el mismo sentido y con la misma fuerza para poner remedio a esto», ha concluido.