Las cosas en el FC Barcelona están fuera de control debido a todo el escándalo que ha vuelto a la luz con el Barçagate. Si bien todo este caso estalló en febrero de 2020, justo ahora sale a relucir una vez más debido a que las investigaciones realizadas por los Mossos d’Esquadra los han llevado a detener, durante los primeros días de marzo, a Josep Maria Bartomeu, expresidente del club, junto con otros dirigentes del equipo catalán; su mano derecha Jaume Masferrer, al director general Óscar Grau y al jefe de los servicios jurídicos Román Gómez-Ponti. El panorama no podría ser más gris para una entidad catalana que no termina de salir de un problema para entrar en otro. Y es que, junto a los grandes problemas que tiene en todos los ámbitos, ahora no es un buen momento para agregar una nueva calamidad a la lista.
El caso es que todo inició por afán de poder y prestigio que Bartomeu no tenía y que ansiaba con todas sus fuerzas; eso lo habría llevado a tomar una decisión nada aconsejable como la de aliarse con una empresa experta en redes sociales para manejar la opinión pública a su antojo y hacerla más favorable hacia su persona. Si bien la auditoría externa llevada a cabo por PriceWaterHouseCoopers (PwC) dejó ver que ni el club ni el expresidente tenían algo que ver con el Barçagate, pues para las autoridades de Cataluña las cosas no son así; por eso habrían efectuado las detenciones mientras continúan las investigaciones que ellos están llevando a cabo. Lo peor es que nada de eso funcionó, porque ahora la opinión en contra de Bartomeu no podría ser peor y toda esa trama que habría inventado, realmente puede salirle aún más costosa.
Un contrato con I3 Ventures muy caro
La información del programa ‘Què T’hi Jugues’, de SER Catalunya, reveló que desde el 2017, el club catalán tenía un vínculo con la empresa ‘I3 Ventures’, una institución propiedad del argentino Carlos Ibañez, cuyo único fin era para con el club catalán era hablar mal, difamar y desprestigiar a todos los individuos o entidades que estuvieran en contra de Bartomeu y su directiva. Para tal fin se utilizaban seis cuentas de Facebook afines a club, que además de alabar y generar una matriz de opinión favorable para el expresidente y los suyos; si que ponía por los suelos a todos sus rivales, entre los que se incluía a jugadores como Gerard Piqué y Lionel Messi. Como agravante de la situación estaría que todos los pagos para este fin tan ruin habrían salido con dinero proveniente del conjunto catalán.
Según la investigación realizada por ‘Què T’hi Jugues’, el Barcelona habría pagado en total un millón de euros anuales, desde el 2017, a la empresa ‘I3 Vnetures’; con el fin de enaltecer a Bartomeu y desprestigiar a sus rivales utilizado las redes sociales. Ni más ni menos. El problema está en que está es una cantidad demasiado grande para tal cometido; por ese motivo las facturas se habrían troceado durante todo el tiempo en varios pedazos para que no superarán los 200.000 euros y así no tuvieran que pasar por la aprobación de la junta directiva. Esa fue la gran trama y trama de todo el Barçagate. Ya después el equipo azulgrana emitió un comunicado en el que se desvinculaba de lo hecho por ‘I3 Ventures’ y que si se llegaba a demostrar que estaban con las cuentas de Facebook, ellos rescindirían el contrato; algo que hicieron un día después.
Más leña al fuego con el Barçagate
Lo que se generó después de esos sucesos solo sirvió para aumentar el incendió que ya estaba instalado en el Barcelona y que Bartomeu hacía de todo menos lo necesario para tratar de controlarlo. Después de varias reuniones entre toda la directiva, el expresidente se negó a adelantar los comicios pautados para el 2021; pero si responsabilizó de todo lo sucedido a Jaume Masferrer, director del área de presidencia, y pautó una auditoría externa que realizaría PwC. En el Barça la tensión creció y en el juego ante el Eibar el público dedicó una pañolada a Bartomeu y pidió a gritos su dimisión. Sin embargo, todo se agravaría cuando ‘El País’ llegó para echar más leña al fuego al revelar que también existían docenas de cuentas falsas de Twitter manejada por otra la empresa matriz de Ibañez, ‘Nicestream’, que se encargaban de difamar a rivales y a alabar a Bartomeu.
Luego de eso los problemas se multiplicaron: dimisión de varios directivos que se pusieron en contra de Bartomeu y pidieron explicaciones más claras por el Barçagate; los Mossos d’Esquadra entrando en las oficinas del Barcelona para recabar más información; y el resultado de una auditoría que no convenció absolutamente a nadie. Ahora que las autoridades catalanas están metidos en el caso es muy probable que más información surja y revele una mafia más profunda envuelta en todo esto. Ya Bartomeu pasará a la historia, sin ningún tipo de dudas, como el peor presidente en la historia del club blaugrana; incluso ya se adjudicó entrar en grupo de los mandatarios azulgranas que han sido detenidos por las autoridades. En los próximos días se revelarán más detalles, pero está claro que en el Barça las cosas siguen empeorando.