Dicen que la necesidad aguza el ingenio, y el último movimiento de las cadenas de supermercados alemanas Aldi y Lidl así lo corrobora. Desde este miércoles 3 de marzo ambas compañías tienen a la venta en sus establecimientos germanos test rápidos de detección del coronavirus.
Estos test caseros, que han sido aprobados por el Instituto Federal de Medicamentos y Productos Sanitarios alemán, BfArM, tendrán unos precios de entre 5 y 10 euros -depende de la región en la que esté situado el supermercado en cuestión- y permitirán obtener un resultado con una precisión de en torno al 80% en los 15-20 minutos posteriores a su aplicación.
1ALEMANIA CONFÍA EN LOS TEST DE LIDL Y ALDI PARA AYUDAR A CONTROLAR EL COVID
Jens Spahn, ministro alemán de Sanidad, explicó esta pasada semana ante los medios que los ciudadanos alemanes ya pueden adquirir pruebas caseras de autodiagnóstico en cualquiera de las dos cadenas de supermercados más famosas del país: Aldi y Lidl.
Según explicó el mandatario en la televisión pública teutona, esta venta de test servirá de gran ayuda mientras sigue adelante el plan de vacunación ideado desde el Bundestag. Spahn asegura que la existencia de estas nuevas pruebas será “una pieza fundamental” para doblegar la curva de contagios.
Como contó el ministro, ya existen muchas pruebas rápidas para saber si una persona está contagiada, así que es más fácil dar con posibles positivos asintomáticos. Estos nuevos test a la venta en supermercados pueden valer, por ejemplo, para prevenir al visitar a una manera mayor o para asistir al teatro, cine o a un concierto sin miedo a propagar la enfermedad o que nos la contagien.