En la política de fichajes de jóvenes estrellas con mucho potencial que ha utilizado el Real Madrid, el nombre de Vinicius Jr. es uno en los que más esperanzas se tienen puestas. Cierto es que talentos como Martin Odegaard, Brahim Díaz, Rodrygo Goes, Fede Valverde o Reinier suman varios adeptos y se espera que con ellos se pueda formar un equipo temible para el futuro; pero es que la ilusión que generó en su momento el ex del Flamengo no la ha logrado ninguno, porque con él se fichó ese talento innato de Brasil que hace levantar a todos de sus asientos y trae más fanáticos a los estadios. Con Vinicius la alegría parecía estar garantizada; sin embargo, tres años después de su fichaje muy pocos están convencidos de que el joven de 20 años pueda dar más al Madrid de lo que ya ha dado hasta ahora.
La realidad es que Vinicius no se ha convertido en ese jugador importante, desequilibrante y goleador que muchos esperaban cuando Florentino Pérez se atrevió a pagar por él 45 millones de euros; por el jugador que muchos veían como el «nuevo Neymar», tal como lo catalogaron en el país sudamericano. El mandatario blanco aprendió la lección cuando el Barcelona le quitó al astro brasileño y esta vez no dejaría escapar a otra perla de ese país; así que decidió pagar una millonada por un futbolista con mucho potencial, pero que apenas se estaba probando en el fútbol profesional. El talento y calidad que tiene es innegable, el problema es que le falta ese punto extra que los cracks tienen al explotar y que aún Vinicius no ha mostrado; un punto que ya varios parece que se rindieron y no esperan a que lo enseñe
Unos números que lo alejan de los altares
Frente a la Real Sociedad el joven brasileño llegó a una cifra redonda, pues este era su partido número 100, entre todas las competiciones, con la camiseta del Real Madrid. La alegría no fue plena por dos motivos: una vez más comenzó desde el banquillo y al final no pudieron obtener la victoria. No obstante, en su recuerdo quedará que el gol del empate en su partido 100 de blanco, lo marcó él al aprovechar una buena asistencia de Lucas Vázquez, tras una gran jugada de Fede Valverde. Su gol mantiene vivas las esperanzas del equipo merengue para ganar LaLiga Santader, pero sabe a muy poco dado el esfuerzo que hicieron y la importancia que suponía ganar el duelo. Ahora deberán enfrentarse al Atlético de Madrid, aunque si ganan ya no tendrán la oportunidad de alcanzar a los rojiblancos en la tabla de posiciones.
Pese a todo, el gol del brasileño todavía deja abierta la posibilidad de que el Madrid pueda remontar para quedarse con el título. Sin embargo, este también revela un dato tan triste como demoledor: los números de Vinicius no son lo que se esperaba de él. Esos 100 partidos se traducen de tres años de servicio merengue; aunque es una cifra impresionante, viendo su juventud, todo se cae a pedazos cuando se aprecia que nada más a marcado 13 goles y generado 13 asistencias. Tras un comienzo ilusionante de la mano de Santiago Solari, el brasileño ha caído en la irregularidad. Zidane no confía en sus cualidades, sus compañeros no suelen pasarle el balón y que además parece haber perdido la fe en sí mismo; porque en su juego se puede apreciar que ya ni siquiera intenta esos regates con la frecuencia que lo hacía antes.
De Vinicius se espera mucho más
Aunque juega como extremo ha perdido esa fuerza ye se impulso que siempre lo hacía ir adelante en busca de comerse al rival. Con sus características de gran regate, un gran uno contra uno, velocidad endiablada y habilidad con el balón muchos pensaron que acabaría por explotar pronto. No obstante, luego de tres temporadas le sigue faltando ese factor que convierte a unos pocos en elegidos: el poder de la definición. Vinicius tiene todas esas cualidades que le dan potencial de estrella, pero al llegar al área se nubla y no toma la decisión más acertada. Sea falta de puntería, mala suerte o sencillamente que no se le da; la cosa es que el extremo tiene dificultades para anotar y eso en otros atacantes que han jugado para el Real Madrid ha acabado pesando mucho.
Su sueño de ser pieza fundamental en el equipo de la capital española sigue en pie; pero con cada oportunidad que falla, con cada error que comete, con cada suplencia que le da Zidane, esa meta va quedando más lejos. La presión es mucha para este joven talento que tiene en a Florentino Pérez como su fan número 1; sin embargo, con el francés sin creer en su juego y sin querer cultivar su talento, todo será más difícil. Ya Vinicius volverá a tener una oportunidad ante el Atlético, debido a que parece que podría salir de titular, y está será una ocasión de oro para demostrar que con confianza puede lograr las cosas. Si bien en su futuro podría aparecer el fantasma de una cesión, él quiere despejar cualquier duda para salir del ocaso y volver a crecer como ese jugador prometedor que algunos todavía esperan.