El fútbol es, din lugar a dudas, el deporte más popular sobre la faz de La Tierra y si hay dos equipos que lo representan muy bien son el Real Madrid y el Barcelona. Este es un deporte que se ha ido metiendo en el corazón de millones de fanáticos con el paso del tiempo y como ocurre en otros aspectos de la vida, el cariño que le puede tener a esta disciplina pasa de generación en generación. Eso puede suceder con los aficionados, pero con lo profesionales pasa exactamente lo mismo; porque cada vez es más común apreciar como los hijos de algunas de las leyendas más relevantes del fútbol deciden continuar los pasos de sus progenitores y hacerse un vida dentro del mundo del balompié. Los años pasan y el fútbol cambia, lo que no se va es el amor que las nuevas generaciones expresan.
En el pasado sagas míticas como la de Maldini, con Cesare, Paolo y ahora Christian y Daniele, ya han resaltado; no obstante, el turno de los mitos actuales ha llegado y varios pasan el testigo para ver brillar a sus hijos dentro de ese mundo que les otorgó tanto. La cosa es que algunos van más allá y tienen la suerte de ver como sus descendientes hacen relucir el apellido familiar con esas camisetas que tanto lustre dieron a sus padres. En ese campo está claro que dos de los clubes más importantes del mundo, como lo son el Real Madrid y el Barcelona, tienen varias muestras de que el talento si que se lleva en la sangre. En el futuro puede que sus padres tengan que hacer las maletas; pero sus hijos permanecerán tanto en Valdebebas como en La Masía para hacer valer sus apellidos una vez más.
Todavía hay magia que dar en el Real Madrid
Dentro del Real Madrid se puede comenzar con la saga de Zidane que todavía sigue acumulando talento. Ya Enzo y Luca hicieron su camino en la cantera del conjunto merengue y llegaron a debutar con el primer equipo; sin embargo, ahora sus pasos los siguen sus dos hermanos restantes: Théo y Élyaz. Del primero dicen que es el que tiene más talento de todos los hijos de Zidane. Con gran visión de juego, esa técnica, calidad y buena puntería frente al arco. Théo es un mediapunta de 18 años que, pese a estar en el Juvenil A, ya ha visto acción con el Castilla que dirige Raúl González y también ha llegado a entrenar a las órdenes de su padre en el primer equipo. Élyaz por su parte, dejó el ataque a sus hermanos y como Luca miró mejor hacía atrás; aunque el se quedó en la defensa.
La posición del último de los Zidane es la de lateral izquierdo y desde allí le gusta ayudar al equipo aportando en el ataque y defendiendo su portería. La magia de su padre ahora también quiere exhibirla desde la defensa; claro está, con su propio toque para llegar lejos en el fútbol. Otro que hace vida en Real Madrid es Enzo Alves Vieira, quien es hijo de Marcelo. A diferencia de su padre, Enzo es un delantero que perfora las redes en el Alevín A; su calidad goleadora es abismal y ya apunta maneras de un gran atacante. También en la cantera se encuentra Lucas Cañizares, hijo de otra leyenda como Santiago Cañizares y que, al igual que su padre, quiere apuntar alto desde el arco. Lucas es del Juvenil A, pero ya vio acción con el Castilla y fue convocado por Zidane con el primer equipo.
En el Barça esperan al nuevo Messi
Ya en las categorías inferiores del Real Madrid se respira mucho fútbol proveniente de la sangre de grandes futbolistas que han dejado su huella con los merengues. Sin embargo, en el Barcelona también hay brotes verdes creciendo en su cantera y entre todos ellos está la esperanza de que se encuentre el nuevo Messi; aunque puede que no haga falta buscar mucho, porque ya hay uno de la saga del argentino dando sus primeros pasos. Thiago Messi ya se encuentra entrenando en la cantera blaugrana y sus movimientos apuntan a que puede tener una faceta goleadora como su padre. Si con ocho años ya deslumbra, muchos ya se imaginan lo que podría dar al Barça dentro de unos años. Al parecer sus hermanos también podrían entrar pronto en las categorías inferiores del equipo blaugrana; por lo que que la saga Messi de verdad tendría un gran relevo.
También otro de los que puede ayudar al Barcelona en el futuro sería nada más y nada menos que Milan Piqué Mebarak, hijo del defensor Gerard Piqué. Hace unos años que el central tiene a su hijo entrenando en la cantera del conjuno azulgrana; de hecho, en una entrevista en el 2019 explicó que tanto su hijo como los de Messi y Luis Suárez compartían equipo. Con ocho años ya se luce con el balón en lo spies y su padre declaró que ya es una pasioando del fútbol, una actividad que se le da de forma muy natural. «Los niños, muy bien: el mayor es más futbolista; el pequeño, más artista», comentó Piqué. Con Milan podría tener la continuidad de su apellido sobre el terreno del Camp Nou. En el Real Madrid los hijos de las estrellas brillan, pero el Barça en ese aspecto no se quiere quedar atrás.