El Abierto de Australia encumbró nuevamente a Novak Djokovic a todas las portadas deportivas debido a que se quedó con el título de está difícil edición de 2021. Todo el certamen estuvo envuelto en un aura llena de complicaciones, esto gracias a la pandemia del coronavirus que asola el mundo. Después de semanas de confinamiento obligatorio, de no entrenarse adecuadamente y de batallar contra las directrices de los organizadores; los tenistas se adentraron a la pista a hacer lo que mejor saben: jugar al tenis. En eso el mejor fue el serbio que se impuso pese a un desgarro en el abdomen y ofreciendo un gran nivel en la final contra Daniil Medvedev para llevarse el título. Gracias al triunfo, el balcánico dio un paso más para acercarse al que sin duda alguna es el objetivo que persigue junto al «Big 3».
Tanto Roger Federer como Rafael Nadal, junto con el serbio, están inmersos en una carrera para ver quien se convierte en el mejor tenista de la historia. Pese a que solo Djokovic lo ha admitido en múltiples ocasiones, sus dos rivales prefieren ser más comedidos y alegan que solo se encuentran centrados en disfrutar del tenis. Sin embargo, ninguno logra ocultar la verdad y se nota a leguas que también persiguen ese anhelado cetro como el mejor de la historia. No lo admitirán con palabras; pero sus acciones hablan por ellos. La cosa es que el balcánico dio un paso más al conquistar su noveno Abierto de Australia y con ese trofeo dio dos golpes sobre la mesa muy fuertes que lo encaminan todavía más: rompió el récord de semanas en el primer lugar del ránking ATP y se acercó al récord de 20 Grand Slams de Federer y Nadal.
Djokovic tiene en la mira los Grand Slams
En la mente de Djokovic estaba claro que uno de sus objetivos primordiales era asegurarse ese récord de más semanas en el primer lugar del ránking ATP, por eso lo llegó a destacar como su prioridad en una entrevista hace unos meses. Allí dejó claro que estar en esa posición por más tiempo le daba más prestigio que nadie, debido a que cualquier tenista puede tener una semana buena y ganar un título; pero que no todos podían mantener un nivel tan arrollador por tantas semanas para estar en la cima. Su lógica tiene mucho sentido; más al ver que el récord estaba en manos de Federer que hasta ahora acumula 310 semanas como número 1 y este 8 de marzo, lugar que se aseguró al ganar en Australia, Djokovic llegará hasta las 311 semanas en la primera casilla. Definitivamente es un récord al alcance de pocos.
Con el récord de más semanas en el número ya en la bolsa, Djokovic dejó claro que ahora tiene la mirada puesta en eso que más se suele ver: los títulos de Grand Slam. «Quiero ganar más Grand Slams y romper récords, por supuesto. Y la mayor parte de mi atención y mi energía de ahora en adelante, hasta que me retire del tenis, se dirigirá a los Grand Slam», comentó en la pista tras ganar el Abierto de Australia. El tenista balcánico sabe que la opinión de muchos expertos se centra en cuántos títulos grandes han obtenido los miembros del «Big 3» y allí iba algo rezagado con respectó a Federer y Nadal; no obstante, con su trofeo en el torneo oceánico llegó a 18 títulos de Grand Slam, por lo que solo está a dos del suizo y del español, ambos con 20.
Un descanso le va caer bien
Al ya haber logrado uno de sus objetivos, ahora está claro que su mira está puesta en Roland Garros, Wimbledon y el Abierto de Estados Unidos; aunque primero deberá reposar un poco y guardar las energías para recuperarse de ese desgarro en el abdomen que lo perjudicó durante el Abierto de Australia. Pese a que jugó con muestras visibles de dolor, muchos lo criticaron al ver que no renunció; por lo que hasta sus mismos compañeros dudaron de si realmente estaba lesionado, más al ver el buen nivel que mostraba. Hay gente que duda de mí y claro que me duele. He aprendido que no se puede complacer a todos y recibiré críticas haga lo que haga. Soy humano y eso frustra, pero he sabido gestionar bien esa frustración», comentó en la rueda de prensa la día siguiente de ganar su noveno Abierto de Australia.
Aunque las dudas siempre estuvieron, las pruebas médicas probaron que no se encontraba a tope y que ahora deberá descansar si no quiere que su lesión empeore. «Vine de otra resonancia magnética que hice esta mañana (22 de febrero) y el daño es mayor que cuando sucedió, cuando hice la primera resonancia magnética después de la tercera ronda», indicó. Djokovic conoce mejor que nadie su cuerpo y a pesar de que no se encuentra en un estado grave, él mismo reconoce que reposar será lo hará durante los próximos días. Los récords están más cerca y el serbio luchará con todo hasta poder romperlos.