Betabel es como se le conoce al tubérculo comestible que pertenece a la familia de las quenopodiáceas, que es una subfamilia de las amarantáceas. Posee una raíz gruesa, mientras que su color puede ser entre rojo o morado gracias a la betanina, el cual es un pigmento con propiedades antioxidantes.
Además de esto posee varios nombres según la región, en español se le conoce como acelga, betarraga, remolacha o beteraba. Existen una gran variedad para su cultivo y consumo como verdura, aunque también se usa como materia prima para otros productos.
Hoy en día de utiliza el betabel para la producción de colorantes, específicamente su pulpa. Aunque también se puede extraer azúcar. Si bien la raíz es la que normalmente se consume, en el pasado se solía comer (principalmente) sus hojas, mientras que la raíz era usada para preparar medicamentos pues se creía que trataba algunos dolores.
Aportes y beneficios del betabel
Este tubérculo cuenta con una buena cantidad de fibra, betacarotenos y antioxidantes. Esta combinación lo hace un alimento ideal para reforzar el sistema inmunológico, además de prevenir los problemas en la vista o al mismo tiempo mejorar el proceso digestivo.
Por otra parte, los antioxidantes ayuda a prevenir el estrés celular, lo cual es una de las principales causas del envejecimiento prematuro. Además, debido a su alto contenido de nitratos se asocia al betabel con la regulación de la presión arterial.
El betabel es también una buena fuente de minerales y vitaminas, entre los cuales se pueden destacar el potasio, el magnesio, el fósforo y el calcio. Todo este cóctel contribuye con una correcta coagulación de la sangre y a su vez refuerza la estructura ósea.
Cultivo y cosecha de betabel
El betabel es una planta bienal y resistente que se puede cultivar en una gran variedad de climas templados. En lo referente a su cultivo, durante sus primeras etapas de desarrollo, genera una gran raíz de almacenamiento, la cual puede llegar a pesar hasta 2 kilos.
Si el betabel no se cosecha durante esa fase, en su siguiente etapa comenzará a crecer. Los nutrientes se usarán para producir semillas y flores, por consiguiente la raíz reducirá su tamaño. Comercialmente el betabel se cosecha luego de la primera etapa de desarrollo.
En gran parte de los climas templados, el betabel se siembra durante la primavera para luego ser cosechado en el otoño. En el extremo norte de la franja ecuatorial, el periodo de tiempo para su desarrollo, más corto, es de 100 días. Por otra parte, en los climas cálidos, la remolacha es plantada en otoño y cosechada en primavera.
La cosecha suele ameritar una gran cantidad de trabajadores. Aunque en algunas regiones se suele emplear un dispositivo de arado por caballo, de esta forma se arrancan las raíces y el resto del trabajo se hace a mano, facilitando la labor.
Aunque en la actualidad existen otros métodos mecanizados, que no solo se encargan de la siembra y la cosecha, también controlan las malezas y aplican herbicidas. De esta forma se reduce el número de trabajadores para esta labor.
En caso de que se tenga que almacenar el betabel, se podrá proteger con paja. Solo se tendrán que cubrir con algunos montones para cubrir la cosecha que ha quedado en la intemperie. De esta forma estará segura para ser entregada luego de algún tiempo.
En cambio, cuando el betabel se congela y luego se descongela, esto puede causarle algunos problemas a la producción. Como resultado de esto, las cargan son examinadas de forma manual antes de ser vendidas.
Uso gastronómico del betabel
Las hojas del betabel pueden ser usadas para el preboggión. También se usa el betabel para la sopa Borsh. Aunque generalmente se suele usar para preparar ensaladas, como la ensalada roja. E incluso se usa para elaborar encurtidos. Hay quienes usan el betabel para preparar zumos, junto con otras frutas.
Pero además de ser usado en la cocina como un ingrediente, también se usa el betabel para producir azúcar. Para ello necesita pasar por varios procesos y así obtener algunas variedades. Además de esto se puede obtener el colorante E162 o también conocido como rojo remolacha.
Variedades del betabel
Estas son algunas de las variedades más famosas de este tubérculo:
- El betabel rojo o morado es la especie más abundante y se caracteriza por su llamativo color rojo vino intenso, además de su particular sabor entre dulce y terroso.
- El betabel rayado tiene una combinación de colores entre amarillo y naranja o blanco, crema y rojo. Sus colores tienen a fundirse entre franjas y suele ser usado en distintos platillos.
- Los betabeles dorados son la variedad menos dulce de todas, pero su sabor es suave y mucho menos terroso. Generalmente se usa para decorar platos con su color anaranjado vivo.
- Los betabeles baby son cosechados mucho antes de tiempo, es por ello que al no culminar su fase de desarrollo inicial, no logran alcanzar su máximo tamaño. Se caracterizan por ser tiernos
- El betabel el azucarero es similar a un nabo y posee un color blanquecino. Generalmente son usados para producir azúcar.
¿Qué te ha parecido? ¿No se te ha antojado un betabel?