El Teatro Real estrenará este miércoles 3 de marzo una versión de la ópera de ‘Norma’, de Vincenzo Belli, apostando esta vez por sorprender al espectador con una ‘puesta en abismo’ en la que una compañía ensaya la obra del maestro italiano, mientras en el exterior una Italia convulsa afronta un difícil inicio de siglo XIX.
«Queremos contar la historia de Norma en un teatro, pero en un modo poético y haciendo que cada persona del público le dé vueltas pensando lo que habría sido ver esta obra en directo en el año de su estreno», ha explicado el director de escena, Justin Way –‘Norma’ vio la luz en 1831 en Milán–.
La escenografía reproduce a un teatro en decadencia con viejos telones, mientras afuera surgen los primeros conflictos nacionalistas debido a la dominación austriaca del norte de Italia. El propio Way ha adelantado que algo de estas tensiones políticas pueden relacionarse con la actualidad, aunque sin dar más detalles –«que el espectador lo vea y luego juzgue», ha apuntado–.
El director artístico del Teatro Real, Joan Matabosch, ha reconocido que «más que ceñirse a la actualidad», la ópera sirve para «anunciar lo que serán las óperas nacionalistas» de Verdi. «Anticipa obras como ‘Nabucco’ y marca un camino al que se apuntará al cabo de muy poquito Verdi», ha señalado.
En octubre del año 2016, el coliseo madrileño recuperaba esta obra belcantística por excelencia tras 102 años sin representarla. La soprano española Yolanda Auyanet será en esta ocasión –junto con la rusa Hibla Gerzmava– la encargada de llevar a escena a la protagonista, en uno de los papeles «más exigentes» de este estilo.
«A Bellini le gustaba ver sudar a la soprano», ha ironizado Auyanet, quien ha insistido en que ya desde el principio –con la famosa aria de ‘Casta diva’– se plantea en escena la «dificultad» de un personaje «con muchos cambios de ánimo y a quien resulta complicado no dejarse llevar por la voz».
«Es un personaje legendario por la dificultad del belcanto, la pureza del sonido y la frase acompañadas por un colchón musical que va sosteniendo la orquesta», ha añadido. En la misma línea, el director de orquesta, Marco Armiliato, ha calificado esta ópera como «una pieza sacra».
«Es la reina y el principio de toda la Historia de la ópera, por su simplicidad y su orquestación tan directa. Quizás no sea tan popular como ‘Rigoletto’ o ‘La Traviata’, pero hay que tener respeto por una partitura de la que Wagner llegó a decir que quería escribir como Bellini», ha explicado.
El Teatro Real alternará estas funciones durante el mes de marzo con la monumental ‘Sigfried’ de Wagner. Estamos contentos por cómo está yendo todo y en especial por la sensación de haber conseguido transmitir que la cultura es segura», ha reconocido el director general del teatro, Ignacio García-Berenguer.
Por el momento, de 14.000 entradas habilitadas para ‘Norma’ quedan 1.300 disponibles –habrá doce funciones hasta el 19 de marzo–. Precisamente, el propio Armiliato ha sido preguntado por la diferencia de políticas culturales entre España e Italia, donde todavía no se han abierto los teatros.
«La situación mundial es un desastre, pero si queremos volver, hay que empezar por estas cosas. Le diría al Gobierno italiano que se puede hacer, pero con mucho coraje y luchando. Es un milagro tener la sensación de normalidad cuando se interpreta un ‘Sigfried’ y veo que en España la situación está más adelantada que en otros sitios», ha concluido.
