Cuando en un gol se puede combinar una exquisito centro un un cabezazo perfecto no hay otra forma de llamarlo: #GolazoDelDia. Aquí tenemos a un delantero que tras quitarse a dos defensores de encima y lanza un centro perfecto para un compañero que en una bestial velocidad se lanza en forma de “palomita” y convierte un golazo.