Tamara Falcó habla sobre el lado oscuro de la fama: «Lo pasé muy mal»

Muchas cosas han cambiado en la vida de Tamara Falcó desde que, poco antes de cumplir 30 años, protagonizase con una gran melena y un look rompedor su anterior portada en Vanity Fair España en 2012. Hoy, la nueva Duquesa de Griñón ocupa la portada de esta gran revista en una nueva etapa de su vida y subida a la cresta de una ola que no tiene visos de atenuarse. En ella, la colaboradora de televisión trata temas como el amor, la monarquía, sus proyectos laborales y la triste muerte de su padre, Carlos Falcó.

El lado oscuro de la fama

La hija más espontánea de Isabel Preysler también conoció el reverso oscuro de la fama, especialmente a finales de 2016, cuando atravesaba un momento de inestabilidad emocional. Ella misma resumió su estado de ansiedad de una manera gráfica: «En esa época desayunaba filetes empanados». Gano 20 kilos y su nuevo aspecto «No me reconozco cuando me miro al espejo», declaro fue retuiteado de manera incesante. «Lo pase muy mal. Entonces, muchos contratos que tenía firmados se cayeron. Algunas marcas me dijeron que mi físico no era el que requerían para sus productos. Me penalizaron. Mi hermano, [el cantante] Enrique [Iglesias] no lo comprendía: «Tamara, ¡no te pueden dejar sin trabajo por haber engordado!». Yo, en parte, entendía que habían contratado una imagen y ya no era la misma, pero tengo dudas sobre si eso era ético».

Su trabajo en televisión y la importancia del dinero

Hoy, acaba de conseguir un millón de seguidores en Instagram y en cada aparición en El Hormiguero (Antena 3), la ven una media de tres millones de espectadores, según los últimos datos de enero. Tiene inocencia a raudales, es muy culta, cariñosa, ha conocido gente interesante y te ríes con ella. Por si fuera poco, es magnética. Cuando abre la boca, todo el mundo quiere saber qué es lo que va a decir porque es muy imprevisible. O, lo que es lo mismo, libre», reflexiona el presentador Pablo Motos. A esta colaboración se une su intervención los viernes por la noche en El desafío (Antena 3), donde ejerce de jurado. El espacio cosecha una media de dos millones de televidentes. Hoy su personalidad es el nuevo pilar central del negocio de ser Tamara Falcó, uno de los más rentables de la industria del entretenimiento.

El punto de inflexión en su carrera fue su participación en 2019 en el programa Masterchef Celebrity (TVE), en el que se proclamó vencedora. «Si no hubiera sido conocida, no me habrían llamado para aquello, y tampoco estaría haciendo esta entrevista ahora», ríe.

Sobre su padre, el Marqués de Griñón

El aristócrata dejó escrito en sus últimas voluntades que deseaba que fuera Tamara quien lo sucediera en el marquesado de Griñón, la distinción por la que era conocido en sociedad. «Fue una sorpresa para todos. En esas estamos. A ver si consigo hacerlo la mitad de bien que él. Él es mi referente», musita mientras se le empañan los ojos. Intenta reprimir sus sentimientos en público. «Los dramas no son elegantes»._¿Cómo ha digerido la muerte de su padre? Fue un shock. Ha sido todo muy surrealista. Estas pasadas Navidades han sido muy duras. E*l estaba planeando ir a una boda de una prima. Había 8.000 personas invitadas y le dije: «¿Pero cómo vas a ir?» No pudo asistir. Lo ingresaron a los días. Formaba parte de esa generación que no se queja por nada.