Todos tenemos un lugar al que vamos cada vez que necesitamos hacer un parón, respirar y recargar nuestras energías… ese paraíso personal al que recurrimos para sentirnos más vivos que nunca y al que llamamos ‘hogar’. Bien, para Isabel Pantoja eso es ‘Cantora’, la única finca de su marido Paquirri que sigue el legado del torero y que sigue siendo el reflejo de la vida que llevaba el que fue el gran amor de la tonadillera.
Tras el distanciamiento con su hijo, Isabel Pantoja está en una situación muy complicada y posiblemente vea lo que nunca imaginó. Aunque ya está viviendo una situación que jamás pensó que ocurriría: su hijo humillándola públicamente por las mentiras que ésta le ha contado de por vida. Kiko Rivera lo ha dicho por activa y por pasiva, quiere vender su parte de Cantora para quitarse los pufos económicos que la han creado su madre y su tío Agustín Pantoja.
Este viernes se daba una información en ‘Sálvame Diario’ que hacía estallar todas las alarmas: Kiko Rivera podría haber vendido ya su parte de Cantora a una persona anónima que luego le cedería la finca a los Rivera… aunque era una noticia bastante sorprendente, no nos extraña que los hijos de Carmina Ordóñez, que poco tienen de las cosas que dejó su padre, quieran hacerse con el que fue el hogar del torero.
Aún así, una información equivocada porque Kiko Rivera entraba por directo para desmentirlo, pero sí afirmó de nuevo que su parte estaba en venta y que quiere venderla cuanto antes… ¿qué significaría para Isabel Pantoja quedarse sin su más preciada Cantora?
Isabel Pantoja siempre ha recurrido a Cantora cuando tenía problemas, cuando no quería ser perseguida, siempre ha sido su escondite, su hogar, donde se ha reunido con tantas personas y familiares… Un sitio en el que la vida se para y se retrocede al pasado, ‘hasta las paredes hablan de Paquirri’ dicen muchos que han estado allí.
Sí la tonadillera se quedara sin su finca porque su hijo vendiese su parte sería el fin de su relación, aunque creemos que ya no hay marcha atrás. Además, si se la quedasen los Rivera… Isabel Pantoja ardería por dentro porque sería una derrota incalculable. Ha hecho del cortijo que había en esas tierras una magnífica casa donde no solamente sigue guardando los objetos personales de Paquirri, sino también sus trajes, sus fotografías, sus recuerdos y su vida… esa que tanto echa de menos y de la que parece que ha renunciado a seguir teniendo.