Muy seguido nos frenamos de realizar recetas solo porque nos parece complicados, esto pasa muy seguido con la repostería, pero esta receta de tarta de queso viene a descomplicarnos un poco.
La facilidad
Esta variante la haremos en el microondas, a la que podemos llamar ‘Bowl cheesecake’. Hemos hecho un par de cambios muy simples, sustituir la harina por avena molida, el azúcar por un edulcorante líquido. Al final, obtenemos una tarta de queso saludable con cinco ingredientes y en cinco minutos, lo que se hace más largo es esperar a que se enfríe.
Así que, si apetece darnos un capricho para el postre o para la merienda, tomen nota de la receta paso a paso. No tiene más que mezclar todos los ingredientes en un bol apto para microondas (se puede preparar la mezcla en uno y pasarlo a otro para hacer la tarta, o se puede hacer todo en el mismo bol, que es la filosofía de los bizcochos en microondas, no ensuciar más de lo necesario), e introducirlo en el microondas.
¿Qué es un cheesecake?
Un pastel de queso o tarta de queso es un postre muy popular desde el siglo XX hecho a base de ricota, requesón o queso cheddar, queso quark, azúcar y algunas veces otros ingredientes, tales como: huevos, crema de leche, patata, almendras o frutas (limones o naranjas, etc.). También pueden agregarse ciertos saborizantes, tales como mermelada, chocolate o whisky.
Todos estos ingredientes se colocan en una capa o costra hecha de magdalenas trituradas, galletas Graham, o bizcocho que puede ser preparado en caliente horneado o en frío, cuajando refrigerado en la nevera. La base estilo repostería es horneada o refrigerada, siendo este último pastel mucho más ligero que uno tradicional cocinado.
Algunos tipos de pasteles de queso son más parecidos a tartas y otros más parecidos a pasteles, bizcochos o pizzas.
Un postre tradicional
El pastel de queso es uno de los postres más comunes del mundo y, quizás, uno de los más antiguos que utilizan lácteos diferentes de la leche. Hoy puedes hacer una que engorde poco.
El primer registro que hace mención a la tarta de queso viene del año 2000 a. C. aunque no será hasta el romano Marco Porcio Catón (o Catón el Viejo), cuando la receta aparezca en uno de sus tantos libros, con apuntes de cocina romana, llamado «De Agricultura».
¿Dónde nace la tradición?
Una antigua forma de tarta de queso podría haber sido un plato muy popular en la Antigua Grecia, incluso antes de la adopción romana del platillo con la conquista de Grecia. La mención escrita más temprana de un pastel de queso fue hecha por el médico griego Aegimo, que escribió un libro sobre el arte de hacer queso. Catón el Viejo, en su manual De Agri Cultura (también llamado De Re Rustica) incluye recetas de tres pasteles para usos religiosos como ofrendas: libum, savillum y placenta.
De los tres, la placenta es el más parecido a la mayoría de los pasteles de queso modernos, con una corteza que se prepara y se cuece por separado. Es importante señalar que a pesar de que a estas primeras formas se les llamó «tartas de queso», diferían mucho en sabor y consistencia de la tarta de queso moderna, que surgió en Europa en el siglo XVIII cuando en estas antiguas recetas la levadura fue sustituida por huevo, adquiriendo una textura más de postre.
Sin embargo, la fabricación de queso se remonta hasta antes de 2000 a. C., encontrando los arqueólogos moldes para hacer queso que datan de ese periodo. Integrado definitivamente al patrimonio gastronómico europeo, este postre cruzó el Atlántico con el flujo de inmigrantes que llegaron a Estados Unidos en busca de mejores condiciones de vida.
En 1872 un quesero norteamericano al intentar copiar el neufchâtel, un queso de origen francés, terminó creando un nuevo queso cremoso que con el tiempo daría lugar al nacimiento del famoso queso philadelphia, el ingrediente principal de la tarta de queso preparada refrigerada.
La variante más sencilla y rápida
Esta receta está hecha para los amantes de lo sencillo, pero también para los amantes de una buena tarta de queso
Ingredientes (Por persona)
- 1 huevo L
- 100 gramos de yogur natural
- 100 gramos de queso crema o queso de untar
- 10 gramos de avena integral molida
- c/n de edulcorante o endulzante (al gusto).
Elaboración
Pon en un bol el huevo, el yogur, el queso crema, la harina de avena (puedes utilizar la que desees) y el edulcorante. Mezcla bien hasta obtener una crema fina y homogénea. Introduce el bol en el microondas y programa dos minutos a 800 vatios. Cuando lleve un minuto y medio comprueba cómo va la cocción, seguramente se habrá hecho por el borde pero el centro estará semilíquido.
Pues la primera vez, para coger el punto a tu bol y a tu microondas, continua la cocción vigilando cada 30 segundos hasta que el centro de la tarta esté casi casi cuajada del todo, puede bailar un poco, como una panacota o un flan. Una vez conseguido esto, deja enfriar la tarta a temperatura ambiente y después dale un reposo en la nevera para que coja más cuerpo y más sabor.
Acabado y presentación
En cuanto esté fría se puede comer (y caliente también), aunque normalmente nos gusta dejar reposar las tartas de queso unas horas, con este bowl cheese cake podemos hacer una excepción porque es un recurso rápido para satisfacer un antojo.
Para degustar la tarta de queso, puedes desmoldarla o servirla en el mismo bol, por ejemplo, con un poco de crema de chocolate (y calabaza) para untar, tienes la receta aquí, ya sabes que es una versión de ‘nutella’ saludable, con unos frutos rojos frescos, con un poco de galleta desmigada a modo de crumble.
Tiempo de «Horneado»
Sobre el tiempo que debe programarse en el microondas, puede haber variaciones de un microondas a otro, aunque sea con la misma potencia, y también puede cambiar según el material del bol, el grosor… si los ingredientes están fríos o a temperatura ambiente, con los consejos incluidos en la receta, esta tarta quedará divina
