Masour Ousmane Dembélé, mejor conocido por todos en el ámbito deportivo simplemente como Ousmane Dembélé, el prometedor e interesante extremo derecho del Fútbol Club Barcelona de la Primera División de España, una de las instituciones más ganadoras en toda la existencia de esta disciplina, influyentes en todo el globo terráqueo a través de sus millones de fanáticos distribuidos en diversos continentes y llamativas por sus múltiples títulos y característico estilo de juego, ha dejado sumamente atrás a las lesiones que normalmente le acompañan y se habría convertido en una de las piezas más fundamentales del equipo blaugrana para esta temporada 2020/21, la cual por fin ha logrado encaminarse de forma correcta para los culés, por medio de un drástico cambio positivo que le ha dado a su vida, alejándose totalmente de las fiestas y del explosivo mundo nocturno, el cual le ha permitido tener una nueva faceta en su carrera profesional, completamente sana y equilibrada que le llevaría a deslumbrar como se ha esperado desde su llegada al mítico Camp Nou en el mercado de fichajes de verano de la campaña 2017/18, proveniente del Borussia Dortmund de la Bundesliga de Alemania a cambio de 140 millones de euros, una cifra que podrían comenzar a recuperar en los siguientes años a través de su excelente rendimiento y nueva forma de ver las cosas, la cual le ha sacado de las sombras y le ha llevado a llamar poderosamente la atención de los diferentes ojeadores de equipos de peso de Europa.
O al menos así lo ha visualizado el director técnico del conjunto cinco veces campeón del torneo internacional de clubes más importante de los cinco continentes, la Liga de Campeones de la UEFA, uno de los certámenes de mayor prestigio y popularidad en todo el globo terráqueo, cuyo trofeo permite a los ganadores ser parte del mejor equipo de la temporada, dándoles un impulso a su valor de mercado y posicionándoles como los futuros objetivos de cualquier institución de peso en Europa, Ronald Koeman, también conocido por todos en el ámbito deportivo simplemente como Koeman, quien no se ha cohibido en alabarle públicamente y confesarle a la prensa que el atacante de 23 años de edad oriundo de Vernon, una población y comuna francesa, en la región de Normandía, departamento de Eure, en el distrito de Évreux, siendo el chef-lieu del cantón de Vernon-Nord y del cantón de Vernon-Sud, ha logrado dar un drástico cambio en los últimos tiempos, el cual ha dejado a todos los presentes sumamente satisfechos, ya que le ven más comprometido y preparado para adueñarse de un puesto en específico en el once titular y convertirse en el futuro inmediato de los blaugranas, quienes seguramente se apoyarán en la base de jugadores jóvenes que tienen en estos momentos para poder sacar hacia adelante al proyecto del neerlandés.
«Gran parte del cambio de Dembélé es por el jugador. Es el que tiene que trabajar y lo ha hecho. El entrenador tiene que intentar crear un ambiente dentro de la plantilla, poner los entrenos que se necesita, y en el tema físico no solo Ousmane Dembélé sino muchos otros jugadores de la plantilla han mejorado, y es un tema muy importante para tener la calidad y explotar. Es importante estar físicamente y mentalmente bien para afrontar la presión que hay aquí. En cuanto a Ousmane Dembélé, no sé qué ha pasado en años anteriores pero viéndole, ha mejorado mucho físicamente y el ritmo de los partidos. Es buenísimo, tiene uno contra uno, es rápido. Me encanta este jugador. Está muy metido, está muy alegre y hay que seguir así», dijo el estratega del Fútbol Club Barcelona de la Primera División de España nacido en Zaandam, una ciudad en la provincia de Holanda Septentrional de los Países Bajos que se sitúa al lado del río Zaan, cerca del Canal del Mar del Norte y muy próximo a la capital Ámsterdam, en la rueda de prensa previa al compromiso correspondiente a la ida de los octavos de final de la UEFA Champions League ante el París Saint Germain Football Club de la Ligue 1 de Francia que dirige Mauricio Pochettino, el cual buscará sacarles en este arranque de la fase eliminatoria de la máxima competición continental.
Aparentemente, Ousmane Dembélé, el prometedor y talentoso extremo derecho del Fútbol Club Barcelona de la Primera División de España, se había caracterizado en el pasado por ser un jugador extremadamente amante de las fiestas, de la vida nocturna y de ciertos excesos con la bebida, sin embargo, para nadie en la entidad catalana es un secreto que desde la llegada de Ronald Koeman al banquillo del combinado veintiséis veces monarca de LaLiga Santander, máxima categoría del balompié del país de piel de toro, el campeón de la Copa Mundial de la FIFA Rusia 2018 con la selección de Francia que dirige el experimentado y famoso Didier Deschamps, uno de los hombres más emblemáticos de esa nación por lo alcanzado como jugador y como entrenador, ha dado un rotundo cambio en su forma de trabajar, la cual le ha permitido llevarse todo el mérito, dejando a un lado a las lesiones, alimentándose de mejor manera a través de una dieta equilibrada y balanceada y una hora determinada para dormir.
«Físicamente cuando llegué al club, estaba muy frágil. Incluso cuando estaba en el Borussia o Nantes era frágil. Aquí he evolucionado mucho con los preparados físicos. Mi manera de prepararme para los partidos, todo ha cambiado. He cambiado mi estilo de juego, sobre todo en el posicionamiento, cuándo atacar, cuándo calmar el juego, cuándo dar un pase. Me gusta driblar e ir solo al ataque. Y me dicen de calmarme, que espere a los compañeros y que no trate de driblar 3 o 4 jugadores. Desde la llegada de Ronald Koeman muchas cosas han cambiado en los entrenamientos y en la preparación de partidos. Los entrenamientos son de calidad, el equipo está en forma y los jugadores están contentos. La forma en la que gestiona el grupo es genial. Vamos a seguir adelante y tenemos unos objetivos e intentaremos ir al final para ganar títulos», sentenció Ousmane Dembélé en una declaraciones ofrecidas al departamento de prensa del Fútbol Club Barcelona de la Primera División de España.