Los hilos se siguen moviendo tras bambalinas y Florentino Pérez no desiste en su deseo de formar una Superliga Europea que revolucione de una forma total la forma en como se conoce el fútbol en el continente. Sin embargo, este faraónico sueño que se inventó el presidente merengue y que ya tiene el apoyo de varios de los clubes más importantes en Europa, como el FC Barcelona, al que Josep Maria Bartomeu metió en el proyecto justo antes de abandonar la presidencia de la entidad catalana; pues la verdad es que comienza a ganarse algo de simpatía del público. El problema es que la gran mayoría está en contra de este torneo y quieren deshacerse de él sin que haya nacido como tal; en eso precisamente se está moviendo Aleksander Ceferin, presidente de la UEFA, con el apoyo de Javier Tebas, mandatario de la LaLiga.
La idea es que este mega proyecto desafía el evento más importante y el que genera más ingresos dentro del máximo ente del fútbol europeo: la Champions League. Ante ese panorama, Ceferin no piensa dejar que ese sueño de la Superliga Europea se lleve por delante una competición tan increíble que ha existido por más 60 años y que en la visión de todos se espera que dure por muchos años más. Y es que tras tantas vueltas y formatos se ha diseñado una fórmula que beneficia a todos los clubes inmersos en la competición y que incentiva a que la competitividad surja en las ligas locales, algo en lo que está muy de acuerdo Tebas. No obstante, Florentino Pérez es muy ambicioso y quiere generar unas ganancias estratosféricas; pero para combatir eso Ceferin ya tiene un nuevo plan que dará una nueva Champions League más espectacular.
Una nueva Champions League en camino
El sistema ideado por la Champions League, que se aplica desde la temporada 1992-1993, ha sido alabado por todos; sin embargo, tanto Ceferin como altos ejecutivos de la UEFA entienden que podrían revolucionarlo un poco más para no solo combatir contra esa Superliga Europea, también para darle un lavado de imagen y hacerla más atractiva luego de casi 30 años de éxitos con este formato. Según apuntan varios medios, la competición se reestructuraría de gran forma, el nuevo formato se aprobará en este mes de marzo y se aplicará a partir de 2024; este menciona que el torneo pasará de componerse de 32 equipos a 36, de esa manera se organizarán en una primera etapa de fase de grupos de seis equipos cada uno. Aunque en un principio se reducirían los grupos, la cantidad de partidos aumentaría y eso ya es una gran ganancia para todos los equipos involucrados.
Ya el otro gran cambio se produciría en los octavos de final; porque los 16 clasificados se organizarían según los puntos y los goles, a favor y en contra, que hayan obtenido en la fase de grupos. De esa forma se emparejarán para octavos sin tener que hacer sorteo, solo por su posición en esa tabla; es decir, el primero se enfrentará al decimosexto, el segundo al decimoquinto y así sucesivamente. Con esto se evita que los clubes especulen con sus resultados y luchen siempre en todos sus choques durante la fase de grupos para evitar quedar en una posición que los obligue enfrentarse a un rival complicado. Además se recuperará una vieja regla: los cuatro clubes que lleguen hasta la instancia de semifinales estarán clasificados a la siguiente edición del torneo sin importar su posición en su liga local. Todo esto para evitar esa Superliga Europea.
Florentino Pérez insistirá en su sueño
Con todos estos cambios a la vista lo que se busca es generar más expectativas y nuevos alicientes para fanáticos y patrocinadores a seguir pegados a la Champions League; sin necesidad de que quieran observar un torneo tan restrictivo, elitista y sin cambios que será esa Superliga Europea que ideó Florentino Pérez. En ella solo podrán participar los clubes que se determinarán desde la creación del torneo; es decir los Real Madrid, Barcelona, Liverpool, Bayern Múnich, Manchester United, Juventus, entre otros, tendrán su cupo y allí nunca habrá descensos ni ascensos, por lo que ningún otro club, por muchos esfuerzos que haga en su liga local o en otro torneo podrá ingresar a esa Superliga Europea. En teoría los partidos serían todos de gran interés, por los grandes equipos que habrá; pero esto podría acabar con los demás clubes y le quitaría todo el sentido a una competición nacional.
Obviamente Tebas se opone a este proyecto; más aún al ver que los ingresos que generaría esta Superliga Eropea serían de 1.000 millones de euros para el club campeón, lo que le daría capital para llevarse jugadores de todos lados quitándole nivel a otros clubes y eliminar sus deudas. Además, de que sin poder admitir nuevos equipos, las competiciones locales ya no tendrían sentido lo que haría que se invirtiera menos en ellas; por eso Tebas no quiere saber nada de ella y apoya la nueva Champions que le da más posibilidades y competencia también a los torneos nacionales. Ya el futuro dirá que pasará, pero el baloncesto europeo ya dio el ejemplo de su lucha cuando los clubes crearon la Euroliga para llenarse de ganancias sin depender de otros entes. Florentino Pérez quiere lo mismo en el fútbol y por ello luchará hasta el final.