La producción de Sálvame a veces le guarda unas sorpresas envenenadas a sus colaboradores. Algunas bromas sobrepasan ciertas líneas y rozan la humillación en el programa de Jorge Javier Vázquez. Los colaboradores aguantan carros y carretas y no pueden quejarse en demasía por miedo a perder su silla.
Además, las bromas pesadas siempre suelen estar dedicadas a las mismas personas porque otros colaboradores no las aguantarían y dejarían el programa antes de hacer el ridículo. A continuación, te mostramos las humillaciones a los colaboradores de Sálvame que rozan la ilegalidad.
3LAS CONSTANTES HUMILLACIONES A ANABEL PANTOJA
Anabel Pantoja es el blanco de gran parte de los ataques de los colaboradores de Sálvame. La sobrinísima enseguida entra al trapo y se rebota cada vez que le hacen una broma pesada. Siempre se meten con ella riéndose de su adicción a los bollos y a la mayonesa.
Por este motivo, la dirección del programa obligó a Anabel Pantoja a comer bollos durante una tarde para descubrir un invitado del Deluxe. La Pantojita aceptó encantada el reto, pero como lo habían pensado como una humillación, la obligaron a comer un bollo y darle un beso a Kiko Hernández con un plástico de por medio. No todo vale por la audiencia.